23 de diciembre de 2024
No sé por qué, a ciencia cierta, se me ocurre destacar que este trabajo de Maribel Barreto es una suerte de Macondo femenino –no Comala– , pues si en la novela de Rulfo son los fantasmas los que viven su existencia descarnada, en Cien años de soledad pareciera que los personajes están siempre vivos, encerrados en una existencia furiosa si se quiere, pero vivos.