17 de noviembre de 2024
La nueva ley de subsidio a los combustibles es abiertamente inconstitucional y, además, es inservible, infinanciable, muy peligrosa, con beneficios pírricos de muy corto plazo para una pequeña minoría y perjuicios para todo el resto de la ciudadanía. Será otra repartija de los escasos recursos del Estado en el año electoral. Solo reconfirma la estrechez, la pusilanimidad, el pobrísimo nivel de la representación política, que se deja doblegar por grupos de presión en contra del verdadero interés nacional.