La idea de la fundación de Lácteos Doña Angela surgió cuando Federico Figueredo se detuvo a beber agua en Yaguarón y admiraba el paisaje. “Le gustó tanto el lugar que decidió iniciar ahí su lechería, y puso el nombre de su esposa, Doña Angela”, recordó José, uno de los hijos del matrimonio.
En los 90, Agro Industrial Guarapi diversificó su línea de productos con la introducción de variedades de helados y, posteriormente, de confites. Nuevamente su distintiva calidad hizo que estas unidades crecieran y se fortalecieran rápidamente, dando así nacimiento a las heladerías Doña Angela.
Con más de 60 ítems en su portafolio, tres divisiones de negocios, tiendas propias, heladerías y centros de distribución, Doña Angela llega el mercado con la más alta calidad. Una marca con prestigio en el sector alimenticio, dirigida hoy por la tercera generación, que proyecta seguir invirtiendo y llegar a más rincones del país.
La primera planta industrial de Lácteos Doña Angela operó en Asunción, sobre la calle Legión Civil Extranjera. Pero el crecimiento del portafolio de productos, de sucursales y puntos de distribución condujo a erigir una superficie más amplia y con mayores equipamientos.
Asociación de Empresarios Cristianos (ADEC) ome'ë jopói ko pyhare 11 pequeña ha grande empresa ojoajúva ha oñemoambuéva ojuehegui aporte social rehe. Presidente gremio-gua jkarai Juan Luis Ferreira, oñe'ë política ha tavaygua remiandu rehe.