El Comité Económico para América Latina y el Caribe (Cepal) vaticinó un tímido crecimiento del 1,2% para la región, y con riesgos a la baja de persistir las turbulencias en el sistema financiero global. Para nuestro país mejoraron su proyección al 4,2% de expansión, impulsado por el sector el sector agrícola.
La actividad económica exhibió un crecimiento del 4% interanual en setiembre último, acumulando dos meses consecutivos de variación positiva tras varios periodos negativos. No obstante, el resultado acumulado aún se encuentra en zona de retracción, en -1,2%, informó hoy el Banco Central del Paraguay (BCP).
En los últimos 25 años, el desempeño de la economía local se caracterizó por periodos de alto y bajo crecimiento. Un informe del BCP muestra que el crecimiento potencial o tendencial de la economía y que está vinculado a la utilización plena de la capacidad de factores como la producción, el trabajo y las maquinarias ha venido cayendo. Una dinámica incluso ya registrada antes de la pandemia. Al respecto se tejen varias teorías, como que la agricultura tocó su límite o el acelerado proceso de transición del sector primario al terciario, sin contar con estructura necesaria para el sector industrial.
El sector de las operaciones de pagos electrónicos cambió favorablemente en la pospandemia, de 50 mil operaciones mensuales hoy está por encima de las 300 mil. El crecimiento fue posible, dado que más usuarios aprendieron a utilizar este tipo de servicios.
Tras más de dos años de la pandemia, los adultos mayores se han convertido en interés por sus potencialidades y oportunidades en lo que se conoce como “la economía plateada”. Dentro del sostenido crecimiento de la tasa de envejecimiento de la población a escala global, especialistas plantean que el consumo de los países en el futuro se verá positivamente influenciado por el aumento de la población conformada por adultos mayores, que tienen directa relación con necesidades específicas que deben ser cubiertas como servicios de salud complejos, movilidad mejorada, etc.
De lo que se sabe y demasiado es que no estamos bien. El gobierno conoce de esto y no hace nada pero la gente es la que siente en sus bolsillos lo que ocurre. La economía discurre por un camino sinuoso. Y no estamos bien porque el crecimiento no será mayor al 2% del Producto Interno Bruto (PIB), lo que de suyo ya es mucho, también las variables macro que miden la estabilidad monetaria como igualmente la sostenibilidad fiscal no muestran tendencias positivas, esto es, a favor de la gente.