La convivencia familiar prolongada, especialmente durante periodos festivos como Semana Santa, puede ser una fuente de alegría y reencuentro, pero también puede traer consigo una serie de desafíos y sentimientos similares al “mal de barco”, donde el espacio compartido se convierte en una zona de mareo emocional.
La convivencia de los padres con los hijos es el tema a tratar hoy por la psicóloga infantojuvenil, Lic. Ángela González.
Es difícil ver las situaciones desde la perspectiva del otro y sentir como él o ella. Sin embargo, es importante hacer el intento de comprender a los demás para evitar que las caras largas, el malhumor y los roces verbales destruyan la convivencia.
La llegada de un bebé a casa es una situación nueva para toda la familia, y también para el perro. De repente, hay alguien nuevo que grita, y el día a día, muchas veces, da un vuelco.
Perros y gatos son los animales de compañía preferidos. Quien los quiera tener juntos, debe tener mucha paciencia porque a veces se tarda tiempo en conseguir una convivencia pacífica. Y hay casos en los que no se logra.