Hoy presentamos a nuestros lectores una nueva entrega de la importante serie histórica del investigador Mariano Damián Montero acerca de la misteriosa, casi desconocida historia del anarquismo en Paraguay. En esta ocasión, prosiguiendo con el tema del episodio anterior, conoceremos parte de las polémicas aventuras de la prensa anarquista en nuestro país (…y de su inesperada relación con el popular y recordado caricaturista Fiorello Botti).
Continuando con la serie «Historias perdidas del anarquismo paraguayo», en esta tercera entrega el investigador Mariano Montero reflexiona sobre la llamativa invisibilización del anarquismo posterior a la Toma de Encarnación en Paraguay y nos habla de «los cuatro de 1938».
«En las calles alucinadas de la mítica Areguá casacciana, personajes como Octavio Villalba o Rigoberto Molina, que se resisten a hundirse en el sopor de la siesta, que prefieren soñar con los ojos abiertos, son primos hermanos de los anarquistas que tomaron la ciudad de Encarnación». Sobre el día en que Encarnación se convirtió en la primera comuna libertaria de América escribe Montserrat Álvarez.
Por qué nunca veremos verdaderos anarquistas postulándose como líderes carismáticos a cargos de poder en ningún gobierno, nos lo explica en este artículo el comunicador y activista Pelao Carvallo, miembro del Grupo de Trabajo Clacso / Memorias colectivas y prácticas de resistencia.
En 1931, la ciudad de Encarnación (Itapúa, Paraguay) fue por dieciséis horas la primera comuna libertaria de América.
Una amplia etapa histórica del sindicalismo paraguayo aflora a través de la biografía de Ciriaco Duarte, gremialista que estuvo muy cerca del periodismo nacional en varios momentos de su vida. Dicha biografía, convertida en libro por el historiador José Arce Farina, aparece hoy domingo con el ejemplar de nuestro diario. Se trata del volumen ocho de la Colección Gente que hizo Historia, publicada con la editorial El Lector.