Según mensajes que se filtraron y que habrían sido enviados por sindicalistas afines a la administración del presidente, Luis “Luifer” Bernal, la Essap volverá a destinar un millonario desembolso para cuestionadas gratificaciones anuales por fin de año que solían recibir los funcionarios. Unos G. 2.000.000 recibiría cada empleado, entre hoy y mañana. Mientras, llueven las denuncias por falta de agua y caños rotos de parte de vecinos en Asunción y otros puntos del país.
Entre enero y febrero, la Municipalidad de Asunción presentó a la Essap 24 notas en la que enlistó los caños rotos que necesitan arreglo para el posterior recapado. Ni uno de los pedidos se respondió. Mientras, el tráfico es un caos por los baches y por las obras de la aguatera que rompen asfaltos y dilatan las reparaciones.
Cuando todo el mundo necesita de agua potable para aplacar la ola de calor en el país, caños rotos de la Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay (Essap) pierden miles de litros del vital líquido.
Vecinos de la calle Japón, en el barrio San Cayetano de Asunción, denunciaron que un medidor de la Essap pierde abundante agua desde noviembre del año pasado. Hicieron tres veces el reclamo, pero nadie acudió. El vital líquido se desperdicia recorriendo las calles ante la falta de respuestas.
Una cuadra de bache, que es un verdadero tormento para los automovilistas, dificulta el tránsito sobre la Avda. Argaña casi Las Palmas. Por el sitio se debe pasar a paso de tortuga por los socavones, además de ocasionar daños a los vehículos.
Éste móvil de ESSAP, todas las mañanas de 9:00 a 11:00 suele estar en la casa del chofer del mismo cuando debería haber tenido un itinerario u orden de trabajo, y más, sabiendo la infinidad de caños rotos que hay.