El último 13 de julio, el presidente Santiago Peña informó en Villarrica a dirigentes colorados que “ya estamos en campaña... (y) vamos a teñir de rojo a la República del Paraguay” en los comicios municipales de 2026. Como si estuviera muy urgido por el calendario, fue más lejos en una “jornada de Gobierno” realizada en Pilar el último 23 de agosto: aseguró al auditorio que verá “a un ñeembuqueño sentado en el Palacio de López en 2028″, aludiendo a todas luces al vicepresidente de la República, Pedro Alliana. Resulta claramente prematuro que cuatro años antes de su relevo haya lanzado de hecho una solapada campaña electoral que no solo distraerá la atención de gobernantes y gobernados, sino que también causará desde ya la distracción de recursos humanos y materiales del Estado de cara a los comicios internos.
A juzgar por las relativamente irrisorias sumas declaradas para gastar por los precandidatos electorales de los distintos partidos políticos, puede pensarse que los mismos casi no se moverán de sus oficinas, que sus operadores trabajarán “ad honorem”, que sus cartelerías les saldrán casi gratis y que sus vehículos no utilizarán las naftas cuyos precios agobian al resto de la población. Además, hace tiempo ya están en marcha las campañas con vistas a los comicios internos simultáneos del 18 de diciembre. La premura conlleva que el gasto electoral sea mucho más elevado y fuerte la tentación de aceptar donaciones de cualquier origen.
En la última reunión ordinaria del Consejo de Administración de Itaipú se presentó formalmente la flamante Empresa Brasileira de Participaçoes em Energia Nuclear e Binacional SA (ENBpar), que reemplaza a Eletrobras como la apoderada oficial de Brasil en la entidad y compradora brasileña de la energía de la central. Nada que objetar. La posibilidad de tal sucesión está expresamente prevista en el Tratado y nuestro socio está en pleno derecho de hacerla efectiva. Pero mientras Brasil se moderniza y realiza unilateralmente los cambios que considera pertinentes para sus intereses, Paraguay se pierde en cuestiones secundarias, como la tarifa, en vez de hacer exactamente lo mismo y prepararse por su cuenta para un mejor aprovechamiento de la enorme riqueza que implica ser dueño del 50% de una de las mayores hidroeléctricas del mundo, ya totalmente amortizada.
Salvador Romero Ballivián, representante de IDEA Internacional, debatió en ABC TV sobre las regulaciones de contenido a través de las redes sociales en el mundo. Resaltó que el uso de estas plataformas digitales puede ser beneficioso para las campañas electorales.
El ministro de Relaciones Exteriores, Euclides Acevedo, anunció su próxima renuncia al cargo para postularse como candidato para las próximas campañas electorales. Abandona el barco de RR.EE. en llamas y a la deriva en las tormentosas aguas de la revisión del Anexo C, el asunto más crítico de la agenda energética de esta administración gubernamental.
Las campañas electorales siempre pintan de cuerpo entero la forma en que se manejan la mayoría de los políticos de nuestro país. Es el momento en que sacan sus verdaderas garras y podemos saber hasta dónde son capaces de llegar por captar los votos que les permitirá varios años de poder. Estas campañas suelen ser muy reveladoras, porque en esa puja es que terminan contando las fechorías del otro, fechorías de las que tuvo conocimiento vaya uno a saber de qué forma.