10 de enero de 2025
Para cerrar los meses de mayo y junio, llamados, respectivamente, de la madre y del padre, hoy, último domingo del segundo, recordemos a dos inmortales amantes que no desearon nunca tener hijos, como la mayoría de la gente, ni, en consecuencia, los tuvieron, pero cuya historia de amor fue decisivamente fecunda, y no solo para ellos, sino para toda la humanidad: Antoine y Marie-Anne Lavoisier, los muy felices padres de una criatura realmente extraordinaria: la Química moderna