3 de noviembre de 2024
BUENOS AIRES. Cuenta la leyenda que la joven Amancay logró salvar de la muerte a su enamorado tras hallar una hermosa flor. A cambio, la muchacha debía entregar su propia vida a un despiadado cóndor, que fue diseminando las gotas de su sangre por los campos: de ellas nacieron miles de flores, las mismas que hoy embellecen parte de la Patagonia argentina.