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La complicación en el parto de una adolescente Mbya Guaraní de la comunidad Cerro 9, del distrito de Alto Verá desnudó una serie de necesidades y el estado de total abandono en el que habitan los originarios en ese sector del departamento de Itapúa. La joven no pudo ser asistida porque los vehículos de auxilio no estaban disponibles, y la patrullera de la comisaría más cercana no tenía un camino por el cual acceder al lugar.
Nelson Gómez Chamorro, poblador del distrito de Alto Verá, tiene sus tierras a 2 kilómetros de la comunidad indígena, que está dentro de la Reserva San Rafael. Se trata de una comunidad que, hasta hace 8 años, se encontraba en aislamiento voluntario.
La propiedad de la familia Gómez es la última antes de que inicie la reserva. Nelson se considera el vecino de la comunidad Mbya, a quienes intenta apoyar. El terrateniente presentó en varias ocasiones el pedido a las autoridades para que gestionen un camino que permita a los originarios tener una salida hacia el distrito de Alto Verá o, en su defecto, hacia Itapúa Poty.
El camino solamente llega hasta los terrenos de la familia Gómez, quedando pendientes 2 km hasta llegar a Cerro 9. De manera particular, había construido un puente de madera sobre un cauce hídrico, que fue destruido por temporales, así como también tubos de concreto que no aguantaron las crecidas.
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Sin respuesta
Estiman que la población de la comunidad es de entre 20 y 30 personas, de las cuales 13 niñas y niños están en edad escolar. En el sitio donde están asentados, se dedican a la agricultura, la caza y la recolección. La mayoría no cuenta con documentos de identidad.
No cuentan con agua potable ni energía eléctrica, y mucho menos con atención médica ni escuelas. Un docente improvisa clases con los niños bajo una carpa para suplir el acceso a la educación que no llega a esta comunidad desprotegid
El centro de salud más cercano es la Unidad de Salud Familiar (USF) de San Buenaventura, en el distrito de Itapúa Poty, que se halla a 40 km del lugar donde viven.
El proyecto del camino fue declarado de interés por la Gobernación de Itapúa en el año 2013, pero no se concluyó el último tramo hasta llegar a la comunidad. La explicación que dieron las autoridades es que no hay registros de los habitantes que serían beneficiados con este camino, por lo que solo llegaron hasta la estancia Gómez Chamorro.
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Parto encendió las alarmas
El sábado por la noche, una adolescente embarazada entró en trabajo de parto con complicaciones. Las autoridades de la comunidad llamaron a los números de emergencia para pedir auxilio para la menor de edad, que requería atención médica
La ambulancia de la estación de Bomberos más cercana, en la comunidad de San Buenaventura, estaba fuera de servicio. El Hospital Distrital de María Auxiliadora (HDMA), en Tomás Romero Pereira, el más cercano, ubicado a 71 km, ofreció enviar una ambulancia hasta donde fuera accesible el camino; no obstante, no había cómo hacer llegar un móvil hasta la comunidad.
El subjefe de la Comisaría 57ª, Reinaldo Oviedo, intentó llegar con el móvil patrullero de su comisaría sin éxito debido al pésimo estado del terreno, que empeoró tras los temporales que azotaron la zona esta semana.
El bebé nació con la ayuda de una partera y la asistencia de médicos vía telefónica. Entretanto, la menor de 17 años continúa con fiebre, sin poder salir de su comunidad, según contó el señor Gómez Chamorro