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Los ministros de la Corte Suprema de Justicia siguen dilatando una definición sobre la acción de inconstitucionalidad que la exsenadora Kattya González (Independiente) presentó en marzo pasado en contra de su destitución del Senado.
Se inhibieron de atender el caso los ministros César Garay y Eugenio Giménez. Ahora el expediente debe pasar a la cámara de apelaciones para estar integrado por camaristas. Los magistrados aprovecharon los días festivos y el receso judicial, que se inicia desde hoy y se extiende hasta el 31 del mismo mes, para no atender el caso.
El cinco de diciembre del año pasado, la exsenadora Kattya González presentó su quinto urgimiento, en busca de recuperar la banca que una mayoría de 23 senadores cartistas y sus satélites le arrebataron por causales que la propia Fiscalía tiempo después terminó desestimando.
La expulsión de Kattya fue un claro mensaje para los senadores de la oposición. La legisladora independiente en las últimas elecciones obtuvo más de 100.000 votos directos en la lista de candidatos al Senado, convirtiéndose en la cuarta senadora más votada de la Cámara Alta.
González no solo fue una de las más favoritas del Senado, sino que fue una de las principales voces opositoras críticas al gobierno de Santiago Peña y al movimiento Honor Colorado, liderada por Horacio Cartes.
En la reunión del Comando Político de Honor Colorado se bajó la orden para expulsar a la exsenadora, se puso a votación y existieron desacuerdos. El senador Silvio “Beto” Ovelar (ANR, HC) había confesado que se opuso a la destitución de su excolega, pero que tuvo que acatar y perdió la pulseada con el senador Juan Carlos Galaverna.
La expulsión de la senadora opositora desencadenó en la reacción negativa de la comunidad internacional, la Iglesia Católica, los gremios empresariales y comunidades estudiantiles que incluso salieron a las calles exigiendo la restitución de la senadora a su banca.
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Los 23 senadores cartistas y sus satélites no solo violaron el debido proceso de la exsenadora, sino que violentaron su propio reglamento interno para cumplir con la orden del Comando de destituir a González. Ignoraron su reglamento que establecía que para una destitución se requería necesariamente de una mayoría absoluta de votos (30 de 45), y terminaron expulsándola por una mayoría simple (23 de 45).
Las consecuencias de la destitución de Kattya González
La destitución de Kattya González repercutió principalmente en las posturas de la oposición debilitándola frente a imposiciones y atropellos del cartismo en el tratamiento y aprobación de controvertidos proyectos de ley. La Bancada Democrática, denominada así tras la expulsión de la senadora, hoy día se encuentra dividida y en beneficio del cartismo.
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La senadora Celeste Amarilla (PLRA) reconoció públicamente que “bajó los decibeles” a su discurso porque no quería estar como su excolega paseándose por los pasillos reclamando su banca, incluso dejó de llamar “carpero” a quien fuera su principal enemigo político, Basilio “Bachi” Núñez, a quien alabó cuando fue electo por dos periodos más, hasta junio del 2027.
Los senadores liberales Líder Amarilla y José “Pakova” Ledesma votan abiertamente con el cartismo, pese a formar parte del bloque democrático de la oposición. Las fuentes indican que Amarilla teme que el sector de HC concrete su amenaza de expulsarlo por su supuesto vínculo con el narcotráfico. Mientras que en el caso de Ledesma su alianza es para mantener a toda su parentela en la función pública.