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Los millonarios sobresueldos y privilegios de los políticos en el Congreso no solo generan indignación ciudadana, sino también desconfianza en las instituciones, advierte el Dr. Ángel Devaca Pavón, decano de Ciencias Económicas de la UC. Alertó sobre un posible estallido social si la paciencia ciudadana se agota
- Los legisladores se autoaumentaron G. 6 millones de una vez en sus dietas (salarios). Ni los médicos de los servicios públicos alcanzan esa suma. Más que la indignación que provoca, ¿cómo afecta a la economía este y tantos despilfarros en que incurren los que gobiernan?
- El autoaumento de G. 6 millones para los legisladores no solo genera indignación ciudadana, sino que también tiene repercusiones económicas serias que incrementa la percepción de inequidad fiscal, debilitando la confianza en las instituciones públicas. La asignación de recursos de manera discrecional hacia salarios y privilegios, en lugar de sectores prioritarios como salud y educación, genera un desbalance estructural en la economía; además, fomenta la corrupción y la ineficiencia, factores que erosionan el crecimiento económico sostenible y exacerban las desigualdades sociales.
- ¿Cómo afecta?
- Este tipo de despilfarro afecta la estabilidad macroeconómica al desviar recursos del presupuesto general hacia fines improductivos. Cada guaraní destinado a beneficios injustificados para funcionarios públicos es un guaraní menos disponible para la inversión en infraestructura, tecnología o capacitación, que son esenciales para la competitividad del país. Le puedo asegurar que estos legisladores tan generosos en el despilfarro del dinero público no actúan en la misma dirección en sus empresas privadas. ¿Será que el portero, obrero asalariado de su empresa tienen aumento de G. 6 millones en un solo acto cada vez que el gobierno dispone? Es irritante, indignante, insultante para quienes trabajan de sol a sol, 12 a 14 horas para pagar impuestos, IPS, contribuciones, etc. para que ellos vivan a cuerpo de rey...
- ¿Cuál es el estado de las cuentas nacionales? Tanto se celebra el buen estado de la macroeconomía pero en contraste, faltan hasta jeringas en el Hospital Nacional, por mencionar un centro de salud.
- Paraguay ha sido reconocido por mantener indicadores macroeconómicos sólidos, como un crecimiento económico sostenido y niveles de deuda pública moderados. Esta estabilidad sin embargo no se refleja en la calidad de vida de la población. La falta de insumos básicos, como jeringas en hospitales, guantes, remedios básicos, es un síntoma claro de una mala distribución y ejecución presupuestaria que contrasta entre las cifras macroeconómicas y la realidad microeconómica y evidencia un problema estructural en las políticas públicas. Un manejo responsable de las cuentas nacionales no debería solo centrarse en mantener la estabilidad fiscal, sino en asegurar que los beneficios del crecimiento económico lleguen a los sectores más vulnerables. La ausencia de esta redistribución efectiva perpetúa la pobreza y la exclusión social generando una notoria discriminación.
- Desde el 2008, los diputados y senadores aumentaron sus salarios en casi G. 23 millones más...
- Es una cifra que resulta escandalosa en un país donde el salario mínimo no cubre las necesidades básicas de la mayoría de las familias. Estos aumentos salariales reflejan una desconexión entre los intereses de la clase política y las necesidades de la ciudadanía.
- Pero no les conmueve. Hacen valer la mayoría y lo utilizan como un “garrote”.
- El impacto de hecho no es solo económico sino también moral y político. La ciudadanía percibe estas decisiones como una señal de que los líderes políticos están más interesados en perpetuar su propio bienestar que en resolver los problemas del país y se siente estafada. En la campaña electoral se presentaron como ciudadanos ejemplares con buenas intenciones, pero apenas asumen se repite lo mismo. En manada se forman en una línea que desprecia la inteligencia de ese pueblo a quien le pidieron confianza. Ya en el poder, desafían a los que les votaron con sus acciones. A sus autoaumentos hay que agregar la práctica del nepotismo, de colocar a familiares en cargos públicos, pagar salarios a caseros de oro, y otras prácticas nefastas, indignantes. Por supuesto que esto tiene consecuencias graves para la economía. Se debilita la eficiencia institucional y se desperdician recursos públicos y fomentan un círculo vicioso de corrupción e ineficiencia, agravando problemas como el déficit fiscal y la incapacidad del Estado para ofrecer servicios de calidad.
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- La cuestión también obliga a preguntarse ¿a quién le estamos regalando nuestros impuestos?
- Claro. El nepotismo reduce la confianza de los ciudadanos en las instituciones públicas. Esto lleva a una menor participación cívica y a una deslegitimación del sistema democrático. Hay estudios que muestran la desilusión de los jóvenes en la democracia después de votar por primera vez. El interés decrece en forma constante. Para quienes vivimos la dura dictadura sabemos que esto que tenemos parece una dulce primavera, a pesar de sus imperfecciones. Estos jóvenes sin embargo ya no creen.
- ¿En qué medida afecta al aumento del déficit fiscal?
- El despilfarro y la corrupción contribuyen significativamente al aumento del déficit fiscal, eso es innegable. Cuando los recursos públicos se destinan a salarios y privilegios innecesarios e irritantes, en lugar de a inversiones productivas, el Estado pierde capacidad para generar ingresos a largo plazo, peor todavía como en nuestro caso que se endeuda para hacer frente a sus compromisos fundamentales de infraestructura que tanto necesita el país. Esto obliga al Gobierno a aumentar impuestos a futuro. Un déficit fiscal creciente también reduce la capacidad del país para responder a crisis económicas, emergencias como desastres naturales o pandemias. Expone a la población a una condición más vulnerable.
- ¿Es inevitable que en un futuro próximo tengamos que ver a la población sometida a cumplir medidas heroicas, como ocurre en Argentina, como resultado de tanto abuso del dinero público?
- La ciudadanía no debería soportar medidas heroicas para sostener los privilegios de la clase política. Sin embargo, ya está pasando de forma indirecta: el aumento de impuestos, la reducción de inversiones sociales y la precarización de los servicios públicos como vemos todos los días. Mantener este modelo político conlleva mucho riesgo para la paz. Dios quiera que la paciencia del pueblo no desemboque en un estallido social.
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- El Gobierno parece que quiere callar todas las críticas proclamando el “Grado de Inversión” que se alcanzó en las calificadoras internacionales...
- El grado de inversión alcanzado no es un logro para asegurar que la inversión extranjera vendrá como por arte de magia. Lo que permite es tener tiempo de generar condiciones, sobre todo legales, para atraer a los inversores. Ellos requieren de seguridad para recuperar su inversión. Nadie va a venir por el lindo discurso o la publicidad fantástica de las autoridades.
- Una de las calificadoras (Fitch) ya puso el dedo en la llaga, por la ley contra las ONGs que promulgó (el presidente Santiago) Peña...
- Las agencias calificadoras de crédito, como Fitch, Moody’s o Standard & Poor’s, no se limitan a observar indicadores macroeconómicos como el PIB, el déficit fiscal o la deuda pública. También consideran factores cualitativos como la gobernanza, la transparencia institucional, el entorno político, la cuestión ambiental, entre otros tantos medidores de desempeño. Una pérdida del grado de inversión tendrá efectos devastadores como el aumento de los costos de financiamiento externo, lo que significaría mayores tasas de interés para emitir bonos soberanos, que a su vez incrementa la presión sobre el presupuesto nacional, destinando más recursos al servicio de la deuda y reduciendo los fondos disponibles para áreas clave como salud, educación e infraestructura. Los inversionistas pueden percibir que el país no es un destino confiable para sus capitales.
- De hecho no llegan los capitales como se esperaba...
- La falta de inversiones extranjeras directas afecta a la generación de empleo, el crecimiento económico y el desarrollo de sectores estratégicos como la agroindustria y la tecnología. Otro efecto preocupante es el impacto sobre la moneda nacional. Una reducción en la calificación crediticia puede generar incertidumbre en los mercados, provocar salidas de capital y una depreciación del guaraní, que a su vez aumentaría los costos de las importaciones y podría desatar presiones inflacionarias, afectando directamente el poder adquisitivo de los ciudadanos. Organismos multilaterales como el Banco Mundial o el FMI también evalúan el grado de inversión como un indicador de la viabilidad de sus programas en un país. La estabilidad económica y el bienestar de las futuras generaciones dependen de decisiones políticas responsables en el presente.
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- Como economista, ¿será que el presidente Peña estará cómodo en su sillón cuando no puede impedir este “Sodoma y Gomorra” en que están enfrascados sus parlamentarios?
- El presidente Peña enfrenta un desafío de liderazgo. Le sopla en contra un ambiente raro. Se encuentra en una posición complicada, atrapado entre las demandas de la ciudadanía y las presiones de un Congreso mayoritariamente oficialista que se autoadjudica cada tanto nuevos privilegios. Se le está yendo el Gobierno rápidamente. En poco tiempo más empezará el abandono y querrá buscar refugio en la ciudadanía, pero puede ser tarde. De hecho hace meses que se comienza a promocionar a su futuro reemplazante (Pedro Alliana). Cuando va al exterior, es probable que el Presidente sienta incomodidad al ser cuestionado por otros mandatarios sobre la promulgación de una ley que limita el accionar de las ONG, especialmente en un contexto internacional donde la democracia, la libertad de expresión y los derechos humanos son valores fundamentales.
- Conste que se mostraba bastante internacionalista. Hasta su canciller (Rubén Ramírez) ya se mostró al lado de Donald Trump...
- Su decisión de promulgar esa ley puede interpretarse como un retroceso en términos de apertura democrática y respeto a las instituciones civiles. Puede dificultar la construcción de alianzas estratégicas y acuerdos de cooperación. Las ONGs juegan un rol clave en proyectos de desarrollo y asistencia técnica. La vigencia de esta ley plantea interrogantes sobre el compromiso del país con los estándares internacionales de transparencia y participación ciudadana. Al bajar la calificación de Fitch, se pone en evidencia cómo repercuten las decisiones políticas que restringen derechos fundamentales, como la libertad de expresión. Esto afecta la percepción del país como lugar seguro y atractivo para la inversión.
- Los obispos en Caacupé están acentuando sus críticas. Monseñor (Gabriel) Escobar dijo que el país se encamina a una autocracia...
- Las observaciones que hacen los obispos sobre sobre la corrupción y la inmoralidad de la clase política no son exageradas. Son advertencias muy serias sobre la erosión de los valores democráticos. La corrupción no solo afecta la eficiencia del Estado. En realidad, con su conducta, estos políticos lo que hacen es poner en riesgo la estabilidad del sistema democrático.
- Esta conducta impropia de los políticos es lo que incuba a los outsiders que, de repente tienen éxito en política, como es el caso de (Javier) Milei en la Argentina...
- Un pueblo desorientado es engañado fácilmente. Recuerde que venimos de una dictadura feroz de 35 años y estamos en otro período igual con una democracia falaz. Es la consecuencia de la nula educación en la primera y pobre en la otra. El creciente descontento con la clase política ha llevado a la población a considerar la posibilidad de un outsider que implemente reformas profundas. Refleja el hartazgo con el sistema actual pero también conlleva riesgos de inestabilidad si no se gestiona adecuadamente.