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Rolón, quien desde el jueves pasado se instaló en la explanada litoral del Congreso exigiendo una investigación de su caso a la Cámara de Diputados, fue atendido en la noche del jueves tras sufrir un pico de presión, que lo obligó a levantar momentáneamente la huelga de hambre.
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Sostuvo que tras 48 horas de su huelga de hambre, tuvo que retirarse tras reportar inconvenientes de salud, pero que espera retornar el lunes, día en que se retoman las actividades en la Cámara Baja,
El exfuncionario -descontratado tras reclamar su situación- había denunciado haber sido obligado a realizar labores particulares para el diputado, que iban desde repasar o cocinarle en su residencia, hasta limpiar el excremento de su perro en la quinta en Ayolas denominada “La Guarida del General”.
Si bien el presidente de la Cámara de Diputados, Raúl Latorre, anunció la apertura de una investigación, y que según Rolón, el director interno de Recursos Humanos y director jurídico de la Cámara Baja, Máximo Medina, se acercó a ofrecerle la posibilidad de dialogar, hasta el momento no ha tenido respuesta a sus reclamos.
Este puntualmente solicita corroborar presuntos descuentos salariales irregulares, a consecuencia de las ausencias obligadas, por tener que cumplir labores particulares en Ayolas, por ejemplo.
También cotejar si no le correspondía el cobro de una bonificación salarial por el cargo de “encargado de despacho”.