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El proyecto de ley que establece el control a las organizaciones sin fines de lucro “está mal escrito, se expone a interpretaciones muy raras y mezcla los conceptos”, según el director ejecutivo de Fundación Paraguaya, Martín Burt.
Precisó que el plan menciona prestaciones de exclusiva competencia del Estado, pero no define a qué corresponden.
“Nunca explica qué significa prestaciones y cuáles son esas prestaciones de exclusiva competencia del Estado”, declaró.
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Persecución del Estado
Otra objeción que mencionó es que el artículo 1 del proyecto de ley incluye a entidades “que de alguna manera tengan relación” con el Estado, lo cual da apertura a una interpretación que derive en una persecución a organizaciones que estén en contra del Gobierno.
“Me gustaría que la ley sea precisa y no se preste a interpretaciones erradas o al abuso de autoridad”, dijo.
Burt afirmó que la normativa debe establecer de forma clara que las organizaciones que no tengan ningún vínculo con el Estado no deben rendir cuentas.
Agregó que, de lo contrario, afecta a organizaciones que no están vinculadas al Estado, según su criterio.
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Entidades privadas se retirarán
El director de la fundación señaló que, si no se aclara el alcance de la ley, “las entidades privadas se van a retirar (de convenios con el Gobierno) y eso va a crear un problema enorme”.
“Hay que promover la transparencia, eliminar cualquier ambigüedad que pueda prestarse para perseguir a las instituciones que son contrarias al Gobierno. Hay muchas cosas que aclarar en esta ley porque no es sana y como está va a crear más problemas que soluciones”, dijo.
El Senado dio media sanción al proyecto de ley mediante el voto del cartismo y sus aliados. Ahora, el plan debe ser sancionado o rechazado por la Cámara de Diputados.