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Este Gobierno ya ha adquirido millonarias deudas para diversas finalidades. Actualmente, la deuda pública asciende a US$ 996,3 millones y el Estado sigue gestionando más préstamos. El senador José Oviedo, miembro de Comisión de Cuentas y Control de la Administración Financiera del Estado, señaló que dentro del Congreso no tienen siquiera la posibilidad de debatir sobre la utilización de estos fondos.
“Cuando nos llega un proyecto de ley para dar un acuerdo, ya tiene la firma del ministro y ya es casi imposible cambiar algún término de ese contrato. Lo que tenemos que dar es nuestro acuerdo o no”, señaló. Aseguró que en su momento ya pidió al Ministerio de Obras Públicas detalles, por ejemplo, de cómo se va a utilizar el préstamo para el sistema de alcantarillado para Mariano Roque Alonso, los precios de cada insumo y datos de la obra, pero nunca recibió respuesta.
Señaló que su mayor preocupación es que ni siquiera en el Senado saben los detalles de “qué exactamente se va a pagar con esa plata” que llega a través de los préstamos, para poder hacer un análisis a profundidad. “Viene el proyecto de ley y en anexo viene el contrato del préstamo, pero solo se detalla las condiciones en las que se va a pagar, los plazos”, explicó.
Contó que él habitualmente vota por el rechazo de los préstamos, pero no porque esté en contra de las obras, sino porque no sabe si realmente se harán en forma y costarán ese monto presentado en el proyecto.
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La mayoría cartista “arrasa con todo”
Señaló que la mayoría cartista dentro de la Cámara dificulta el debate sobre ciertos puntos, como los requisitos medioambientales de los diferentes bancos que otorgan los préstamos. “Hoy en día no necesitan que detallen mucho sobre el acuerdo porque tienen su mayoría aplanadora, con la que arrasan con todo. Si había una mayoría ajustada, iban a explicarnos mejor de qué tratan los proyectos de préstamos”, planteó en ABC Cardinal.
Además, destacó que la mayoría de los préstamos, por ejemplo de la CAF-Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe, tiene como beneficio el pago recién seis años después de la firma, por lo cual todas las deudas que se adquieren ahora serán pagadas recién por el próximo periodo gubernamental.
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