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La Ley de reducción de la utilización de papel fue acatada por algunas instituciones, pero no por el Congreso de la Nación que además de despilfarrar miles de millones en “nepobabies” y otros casos de nepotismo, también sigue pagando mensualmente G. 20.837.700 a Carlos Optaciano Arrúa Arévalos, director de Impresión y Encuadernación.
La mencionada Ley afecta a los ministerios, gobernaciones, municipalidades, entes autónomos, autárquicos y descentralizados, entidades que administren fondos del Estado, empresas de participación estatal mayoritaria y en general cualquier otra autoridad administrativa pública.
“Deberán obligatoriamente adherirse al servicio de Gestión de Documentos en Línea”, señala la Ley.
Lo que dice la Ley
- Artículo 1°: El objetivo de la presente ley es reducir el uso de papel en cualquier gestión pública y reemplazarlo por el formato digital, que deberá quedar registrado, tramitado o gestionado en línea.
- Artículo 5°: A partir de la promulgación de la presente ley, todos los Organismos y Entidades del Estado deberán presentar, en un plazo de ciento ochenta días, un Plan de Adecuación a la Digitalización de Trámites, el cual consistirá en un listado detallado de todos los trámites, tanto internos como externos, que se llevan a cabo en el mismo, y de un cronograma de digitalización de los procesos, sus respectivos reglamentos y adhesión al sistema establecido.
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Impresión de boletines
Carlos Optaciano Arrúa Arévalos, director de Impresión y Encuadernación de la Cámara de Senadores, manifestó que se encarga de la impresión de boletines.
“Anteriormente se hacía la cantidad de 70 a 80 boletines, hoy con el tema de papel cero, hacemos sólo ocho a diez (por día) y son para la Biblioteca Nacional, para nuestro archivo y para los senadores que a veces piden”, especificó.
El funcionario explicó que luego de ser impresos los boletines, estos deben ser doblados a mano y presillados, por lo que cuenta con colaboradores que se encargan de cada tarea.
Es decir, uno imprime, el otro dobla y un tercero presilla, todo esto bajo la supervisión minuciosa del director.