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Eduardo Nakayama calificó de innecesaria la compra de 221 sillas a G. 5.733.031 cada una, así como el cambio de alfombra de la Cámara de Senadores y la compra de computadoras, mientras que en los hospitales no hay medicamentos para hacer frente a la epidemia del dengue.
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El costo de las sillas parlamentarias es de G. 1.266.999.851. Según los datos, 47 irán al Senado, 83 a Diputados y 91 a la Sala Bicameral del Congreso.
“Muchas de esas sillas están todavía en condiciones de utilizar, por más que hayan llegado a valor cero en el inventario del Congreso. En una subasta pública se puede conseguir sacar dinero, voy a pedir al presidente Silvio Ovelar que se haga la subasta. No vale la pena llorar sobre la leche derramada, sino buscar solución y ayudar a la ciudadanía”, dijo el senador.