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Johanna Ortega (PPS) concurrió hoy, junto a los senadores Silvio Beto Ovelar (ANR-cartista), Eduardo Nakajama (PLRA), Kattya González (PEN) y el diputado colorado Raúl Latorre, ante el embajador de los Estados Unidos Marc Ostfield y el enviado Brendan Boundy, Coordinador Adjunto Global en Anticorrupción del Departamento de Estado.
Brindó algunos detalles del encuentro y resaltó el intercambio de avances, y retrocesos en materia de corrupción.
“Yo siento que converso con alguien que representa a un Estado. Nunca siento que vengan con carácter paternal o tutelar. No dejaría que algún emisario venga a dirigir mis acciones en Diputados”, resaltó. Agregó que no recibe condicionamientos de nadie.
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Explicó que si se plantea una agenda se revisa y que probablemente las cooperaciones tienen una agenda. “Le tengo miedo a las agendas interesadas”, enfatizó.
Ley de derribo de aviones
Consultada de por qué desde Estados Unidos no habría interés que se apruebe en Paraguay una Ley que permita el derribo de aviones de narcotraficantes, Ortega señaló que debe haber ciertos intereses. En esta cuestión no quiso profundizar, por falta de mayor conocimiento.
No le parece correcto que haya legisladores que se dejen llevar por posiciones externas cuando tienen su propia postura, a favor del proyecto de derribar estas aeronaves.