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El intendente de Limpio, Optaciano Gómez (PLRA), en noviembre del año pasado llamó a una licitación por Vía de Excepción para la construcción de ocho aulas para la futura sede de la filial de la UNA en la ciudad, argumentando que la obra debía culminar en marzo último. La misma fue adjudicada a la Constructora SG, propiedad de Santiago Dionicio Guerrero López, por G. 2.248 millones, y por lo cual se pagó como adelanto el 20% del costo total.
Sin embargo, en una visita que realizaron los ediles liberales Eliodoro Marecos, César Gómez y Óscar Barreto; y los concejales colorados César Méndez y Santiago Barreto, constataron que los trabajos no tienen ni el 10 % de avance. Además, improvisan las construcciones pues se tuvo que demoler el hormigón de la fundación, no hay estudio de suelo y la zona es inundable.
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Los ediles tampoco encontraron en la mañana del sábado al fiscal ni al residente de la obra para controlar los trabajos.
Además no tienen probetas de toma de muestras de hormigón para determinar la resistencia de la estructura. Asimismo no se cuenta con la cantidad necesaria de albañiles para hacer la obra.
El edil Marecos, quien es ingeniero civil, indicó que la construcción se realiza de manera improvisada, que se tuvo que demoler de nuevo una parte y se hizo sin criterio técnico.
“Le metieron mazo y picos para demoler cuando lo que se debía hacer es con un disco para evitar golpear la parte estructural”, dijo el profesional.
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No hay presupuesto
La Universidad Nacional de Asunción no cuenta con presupuesto para habilitar una filial en Limpio, y si bien existe un convenio con la Comuna, en ninguna parte del documento habla de una filial, pero el intendente incluso dijo a Contrataciones Públicas que era una obra urgente para la UNA.
Al ser consultado por qué la Junta Municipal aprobó el proyecto si la UNA no tenía presupuesto para habilitar una sede ahí, dicho edil dijo que fueron engañados por el intendente, quien argumentó que se debía ejecutar la obra para que las clases ya se inicien este año, en marzo.
Al respecto, llamamos al número de línea baja de la empresa constructora con terminación 790, pero nadie atendió, y el intendente tenía el teléfono celular apagado.