Erico Galeano, diputado y senador electo calificó de “persecución política inmisericorde” la imputación formulada en su contra por el Ministerio Público por los supuestos delitos de lavado de dinero y asociación criminal, en el marco de la investigación “A Ultranza”.

El diputado Galeano, de la facción cartista Honor Colorado de la ANR, fue imputado la semana pasada por los fiscales Silvio Corbeta y Deny Yoon Park, quienes solicitaron su prisión preventiva, y un pedido de desafuero firmado por el juez Gustavo Amarilla fue remitido a la Cámara de Diputados el lunes.

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La investigación al diputado Galeano gira principalmente en torno a la venta por un millón de dólares de un inmueble ubicado en un complejo propiedad de uno de los investigados en “A Ultranza”, que no fue incluido en su declaración de bienes al momento de convertirse en funcionario público en 2018, cuando asumió su banca en la Cámara Baja; y el torno al uso de una avioneta de su propiedad para el traslado del presuntos narcotraficante uruguayo Sebastián Marset, una de las principales personas de interés en el marco de la investigación “A Ultranza”.

Erico Galeano y el terreno vendido por un millón de dólares

El diputado Galeano dijo que adquirió en 2013, por 200.000 dólares, el terreno que posteriormente vendió por un millón de dólares, ubicado en el complejo Acqua Village, en la localidad de Altos, departamento de Cordillera, agregando que su residencia en el sitio se inauguró en 2016 pero que él solo vivió allí por alrededor de un año, decidiendo poner la propiedad en venta para cubrir gastos médicos de su esposa, a quien le fue diagnosticado un cáncer.

Sin embargo, dijo que no tuvo ofertas por la propiedad hasta 2020, cuando “de la nada recibí cinco personas interesadas en la compra”, finalmente vendiendo la propiedad a Hugo González por un millón de dólares, aunque el diputado cartista dijo que nunca “tuve el placer de conocer” a González, ya que la transacción se realizó por medio de intermediarios.

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El legislador afirmó que destinó 600.000 dólares del millón que recibió por la propiedad a una cuenta bancaria, además de utilizar los fondos para pagos de expensas, impuestos y comisiones.

“No es que yo compré por 200.000 dólares y lo vendí por un millón e hice un lavado de dinero exagerado sobre la venta de ese inmueble”, dijo.

La avioneta

Sobre la acusación de asociación criminal en su contra por el traslado de personas vinculadas al supuesto esquema de lavado de dinero del narcotráfico investigado en “A Ultranza”, el diputado Galeano relató que era dueño de una aeronave que “estaba parada mucho tiempo” por poca frecuencia de uso, por lo que el piloto Diego Quiroz “me dijo de la posibilidad de hacer taxi aéreo”.

Afirmó que su avioneta realizaba ese servicio de “taxi aéreo” desde Asunción hacia Ciudad del Este, Encarnación y Salto del Guairá, a “aeropuertos controlados”, y que ni él como propietario ni el piloto sabían quiénes viajaban en el avión, argumentando que el control de los pasajeros es responsabilidad de las autoridades aeroportuarias, policiales o militares.

“Mal podía haber sabido yo, mucho menos verificado, el prontuario de esta gente”, dijo.

El diputado Galeano negó haber tenido ningún contacto con Miguel Ángel Insfrán o Sebastián Marset, afirmando que esas personas tomaban vuelos no solo en su aeronave sino en las de varias otras personas.

“Muchísima más gente debería estar imputada por haberlos trasladado de un destino a otro”, ironizó.

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Sobre el hecho de que su avioneta no está registrada ante la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil como taxi aéreo, el legislador se limitó a decir que “todo el mundo hace taxi aéreo” y que “no hay una ley que impida”, agregando que si hay impedimentos “es una falta administrativa de la Dinac permitir ese tipo de trabajo”.

“Yo soy inimputable”

El diputado Galeano insistió en que la imputación en su contra es una “atrocidad jurídica”, señalando que tiene “doble inmunidad” por sus fueros parlamentarios como diputado en funciones y como senador electo, a pesar de que aún no fue proclamado como miembro de la Cámara Alta por el Tribunal Superior de Justicia Electoral.

“Yo soy inimputable, los fiscales lo máximo que pueden hacer es solicitar mi desafuero a los efectos de mi imputación”, argumentó, e insinuó que denunciará a los fiscales que lo imputaron ante el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados.

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“Estamos hablando de prevaricato (…), yo soy diputado con fueros, no me pueden imputar”, insistió.

Consultado sobre las declaraciones del presidente electo Santiago Peña, también miembro de la facción cartista de la ANR, quien dijo que Galeano debe ponerse a disposición de la Fiscalía, el diputado imputado dijo que “voy a ponerme a consideración de la Justicia en el momento y tiempo que yo considere oportuno”.

“No voy a renunciar a mi inmunidad actual, me debo a 28.000 electores que me votaron para que sea senador nacional, quiero el 1 de julio ser senador nacional”, enfatizó.

La bancada cartista en Diputados tiene planeado reunirse hoy para tratar la situación de Galeano ante el pedido de desafuero que llegó ayer a la Cámara Baja.

El diputado Galeano dijo que se pondrá “a disposición de sus pares en la bancada”.

Señala a Derlis Osorio como su “perseguidor” político

El diputado Galeano individualizó como responsable de la supuesta persecución política en su contra al senador Derlis Osorio, de la facción oficialista del Partido Colorado.

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Afirmó que el trasfondo de esa “persecución” es un préstamo de 1.200 millones de guaraníes que Galeano otorgó a Osorio en enero de 2022 “para fines de campaña”, que hasta ahora el senador no ha reembolsado.