Cargando...
El 13 de enero de 1947, tras un autogolpe al gobierno de Higinio Morínigo, se integró el gabinete ministerial con colorados y militares.
Con esto se terminó el gobierno de coalición instalado desde el 26 de julio de 1946 entre colorados, febreristas y militares debido a que se disputaban cuotas de poder y ministerios. En ese entonces los liberales y comunistas estaban proscritos.
Lea más: Fue un funesto hecho el 13 de enero, dice Figueredo
El hecho es considerado por los colorados como el regreso pleno de su partido al poder después de 1904, es decir tras 42 años de llanura.
Puntualmente, en aquel entonces el gabinete de Morínigo estaba constituido por febreristas e integrantes de las FF.AA. Debido a las permanentes peleas entre militares, Morínigo había constituido un gabinete de coalición, con febreristas y elementos de las FF.AA. Sin embargo, debido a los conflictos y peleas por la repartija de ministerios (tres para los colorados, tres para los franquistas y tres para los militares), los febreristas liderados por el coronel Rafael Franco se retiraron del gobierno.
Los militares plantearon entonces excluir del gabinete también a los colorados y que solo permanecieran los uniformados. Sin embargo, la intervención del Mayor Enrique Jiménez, comandante de la Caballería, y el coronel Emilio Díaz de Vivar, jefe de Estado Mayor de las FF.AA., en un operativo militar incruento, determinaron el retorno al poder de los colorados.
Según Morínigo, desde el retiro de los franquistas del gobierno se abrieron dos corrientes dentro del Ejército: uno que apoyaba la conformación de un gobierno militar y la otra tendencia era la coloradización del gabinete. Morínigo apoyó esta segunda tesis.
Guerra civil y stronismo
Pero el giro político en el gobierno precipitó el inicio de la guerra civil de 1947, uno de los conflictos bélicos internos más trágicos de nuestro país. Este enfrentamiento armado terminó con el triunfo del gobierno, controlado por militares y los colorados.
Luego de unos sucesivos cambios en el gobierno, con un golpe militar del 4 de mayo de 1954 irrumpió en el poder el entonces coronel Alfredo Stroessner, quien impuso una dictadura en el país de casi 35 años con el respaldo del Partido Colorado y las Fuerzas Armadas.
Lea más: Un autogolpe para adueñarse del país
Rescate de la fecha
El rescate de la fecha histórica, y que se volvió un símbolo de cambio y retorno al poder en la ANR, lo hizo Luis María Argaña cuando el 13 de diciembre de 1988, en el discurso de presentación del libro: “Ensayos Republicanos”, de Juan Manuel Frutos Pane, dijo que “siempre habrá un 13 de enero”.
Según algunos historiadores, Argaña usaba esta frase para preparar a la ciudadanía con miras a derrocar la dictadura stronista. Según varios autores, el plan original era actuar el 13 de enero de 1989, pero se pospuso para el 2 y 3 de febrero, fecha en que cayó el régimen de Alfredo Stroessner.
Luego, en 1993, Argaña y Díaz de Vivar advertían que podía darse un nuevo 13 de enero, ante el inminente fraude electoral orquestado por el oficialismo representado por Juan Carlos Wasmosy.
Libros
En la literatura nacional se destaca el ensayo “Siempre habrá un 13 de enero. El regreso del Partido Colorado al poder”, en la que reseña, desde la perspectiva colorada, los sucesos que desembocaron en el gobierno de la ANR en 1947. Fue escrito por Juan Antonio Pozzo Moreno.
Firmaton mau y otros usos de la fecha
Para los colorados, la fecha sigue siendo emblemática y es utilizada habitualmente para lanzamientos de campañas y otras actividades, entre ellas el infame Firmatón para la enmienda mau de Cartes.
A modo de ejemplo, el senador colorado Derlis Osorio oficializó su respaldo a la candidatura presidencial del vicepresidente Hugo Velázquez en un acto político que se realizó el jueves “13 de enero” de 2022.
El 13 de enero de 2021, el presidente de la República, Mario Abdo Benítez, desafió públicamente a que le muestren si incumplió promesas de campaña y prometió renunciar (luego aclaró que se refería a promesas de obras de infraestructura).
En esa misma fecha se dio un abrazo republicano con Horacio Cartes en su planta de Cemento de Concepción.
El 13 de enero de 2017, legisladores y dirigentes colorados encabezados por el entonces vicepresidente de la República, Juan Afara, y la senadora Lilian Samaniego, presentaron al TSJE una nota con “360.000 firmas” con las cuales pedían la enmienda constitucional que permita la reelección de Horacio Cartes. Luego se descubrió que miles de esas firmas eran falsificadas o pertenecían a personas fallecidas o inexistentes.
También el 13 de enero de 2013, encabezados por el entonces candidato presidencial, Horacio Cartes, los colorados lanzaron su campaña electoral con miras a las elecciones generales de 21 de abril, buscando retomar el poder.