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Un acto de recordación se realizará hoy en el Cementerio la Recoleta de Asunción, Portón N° 5, sobre la Avda. Mcal. López, Panteón Argaña Ferraro, a las 8:30 de la mañana.
El parlasuriano Nelson Argaña, hijo de Luis María Argaña, y J. Bernardino Caballero, líder y vice líder del Movimiento de Reconciliación Colorada, encabezarán el evento.
La actividad recordará las elecciones internas presidenciales del 27 de diciembre de 1992, la primera interna presidencial tras la caída de Alfredo Stroessner, que enfrentó a Luis María Argaña contra Juan Carlos Wasmosy, este último contaba con el apoyo del entonces mandatario Gral. Andrés Rodríguez.
El fraude
En las elecciones internas de diciembre de 1992 se impuso, según el conteo preliminar del tribunal electoral colorado, la dupla Argaña-Ybáñez sobre la oficialista de Wasmosy-Seifart.
Sin embargo, el oficialismo mandó detener el conteo, rodear la Junta de Gobierno con policías y obligar a renunciar a los integrantes del Tribunal Electoral Colorado para luego cambiar los resultados. Según una de las versiones, las actas electorales se llevaron a la Primera División de Caballería, donde se alteraron los votos.
Incluso el gobierno de Estados Unidos advirtió que no toleraría “golpes” durante esta crisis. Posteriormente, en la cúpula colorada se instaló que Wasmosy le debía su “candidatura” a Rodríguez pero el “triunfo” a Lino Oviedo, por el fraude.
En paralelo, en el país otros temas también captaban la atención ciudadana. El descubrimiento del Archivo del Terror reveló de manera documentada el sistema de espionaje, persecución, delaciones y torturas durante la nefasta dictadura stronista. A mediados de enero, no había resultados en la ANR pero el Juez Nelson Mora decretaba la detención y embargo contra el dictador Alfredo Stroessner, exiliado en Brasil.
Tras la disolución del Tribunal Electoral de la ANR, por renuncia forzada de sus miembros, se convocó a una Convención Extra a realizarse el 27 de febrero. Se necesitaban dos tercios de votos para designar el nuevo tribunal. No lograron ese número en una primera votación, pero si en la segunda, luego de que varios convencionales fueron convencidos “a platazo”. Los pocos argañistas leales abandonaron la sesión, dejando el campo libre para la consumación del atraco a las elecciones.. Finalmente el 4 de marzo, Wasmosy fue proclamado por el nuevo tribunal colorado candidato presidencial en un caldeado ambiente. Habían pasado 67 días.
Historiadores señalan que en la noche de las elecciones de aquel 27 de diciembre Wasmosy incluso tomó el teléfono para felicitar a su contendiente, cuando el conteo de votos ya mostraba una tendencia irreversible a favor de Argaña, pero que Rodríguez lo persuadió y le prometió que Lino Oviedo se “encargaría” del asunto, es decir, el secuestro de las actas y el robo de votos. El ex mandatario reconocería la historia en 2005, durante un debate televisivo, pero sostuvo que quienes hicieron “la mafia” fueron los miembros de “su equipo” y que debió confiar en ellos porque era “nuevo en la política”.
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Castiglioni vs Blanca
El caso volvió al tapete con las denuncias de trampa hechas por el entonces presidenciable disidente Luis Alberto Castiglioni contra la oficialista Blanca Ovelar en las internas coloradas de 2007, con miras a las elecciones generales del 2008, que terminaría ganando el exobispo Fernando Lugo.
En ese año 2008 el senador Juan Carlos Galaverna fue suspendido 60 días sin goce de dieta por inconducta, luego de admitir públicamente en una sesión de la Cámara Alta que él estuvo directamente involucrado en el fraude electoral de 1992 contra Argaña. Poco tiempo después, el entonces senador y empresario colorado Blas N. Riquelme confirmaría la versión en una entrevista periodística.
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Impunidad hasta hoy
Dado que varios de los involucrados admitían el fraude pero no había investigación alguna, en 2010 miembros de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos, que presidía el político febrerista Nils Candia, presentó estas pruebas a la Justicia Electoral contra Lino Oviedo, Bernardino Cano Yegros, Juan Carlos Galaverna y Blas N. Riquelme. Alertaban que todos ellos habían admitido estar involucrados pero seguían impunes y siendo además actores principales en la política nacional.
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En 2019, Nelson Argaña anunció diligencias para entablar una demanda contra Rodolfo Max Friedmann Cresta y Nicanor Duarte Frutos, entre otros, por supuesta adulteración del resultado de las internas del 1992, pero el caso no avanzó .