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Corría el año 1999 cuando Lourdes Beatriz González Gómez, con 20 años, aún registraba como su empleo la panadería La Espiguita, propiedad de su padre Marcial González Godoy, fallecido en 2019. El establecimiento funcionaba sobre la calle Luis Guanella en el barrio Ciudad Nueva de Asunción.
Esta dirección es la misma que la abogada conectada al clan Fretes -cuyo referente es el ministro y presidente con permiso de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Antonio Fretes- declaró históricamente como su domicilio particular.
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Transcurrieron un poco más de dos décadas y, actualmente, Lourdes Beatriz González Gómez pasó de ser aquella ayudante de panadería a toda una potentada empresaria, con acciones por más de G. 8.066 millones, distribuidas en cuatro empresas en las cuales el denominador común es su sociedad con Asdrúbal Antonio Fretes Valenzano, hijo del integrante de la máxima judicial de nuestro país.
Origen modesto
Los registros comerciales dan cuenta que los orígenes de González Gómez fueron muy humildes y que, de la panadería familiar, pasó en el año 2.000 a ser una ENCARGADA DE COBRANZAS de una desaparecida financiera. Luego llega a una entidad bancaria como AUXILIAR DE CRÉDITOS para después en el año 2005 pasar a integrar el staff de empleados del Banco Continental.
A la par de su escalada en ese banco figura en el año 2008 como la asesora jurídica de Negocios y Servicios SA, para entonces una novel empresa de cobranzas. Lo sorprendente es que mientras seguía muy ligada a las dos firmas, Lourdes Beatriz González Gómez, comienza a poner en práctica su espíritu “emprendedor”.
Fue así que constituye en el año 2009 la empresa Servicios Transaccionales SA (Sertrans). Poco tiempo después, en el 2010, ya aparece conectada a otra firma para entonces recientemente creada, Red de Cobros y Pagos SA, cuyo capital social inicial era de G. 3.000 millones.
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Sin parar de mostrar su buena suerte, Lourdes González pasa a formar parte en el año 2012 de otro negocio, esta vez, acompañando la sociedad de su hermano Óscar González Gómez, con procesos por estafa y lavado de dinero. Se trata de la Compañía Latina SA Inmobiliaria, donde la ex ayudante de panadería llegaba para ser la representante legal.
Una bonanza inexplicable
Al parecer todo lo que emprendió Lourdes González dejó muy buenos réditos ya que empezó a realizar mayores apuestas. Fue así que en el año 2013 aporta G. 1.000 millones en EFECTIVO para la constitución de Río Salado SA.
Dos años después, en 2015, la abogada aparece creando la casa de créditos Ahoraite SA, junto a Asdrúbal Antonio Fretes Valenzano, hijo del ministro Fretes.
Ese mismo año también figura como parte de Monetare SA, otra firma de cobranzas.
A partir de entonces el florecimiento económico de González Gómez no paró, llegando a superar quizás su propia imaginación. Es así que en el año 2016 aparece en la asamblea ordinaria de Río Salado SA sextuplicando sus acciones iniciales de G. 1.000 millones. Se presenta con G. 6.300 millones de participación societaria, de acuerdo a los documentos en poder de ABC.
Los documentos detallan que la misma actualmente cuenta con acciones nominales por más de G. 8.066 millones, distribuidas en Río Salado SA (G. 6.500 millones), Tebicuary Campos & Haciendas SA (G. 1.300 millones), Banco Continental (G. 18 millones) y Ahoraite SA (G. 247 millones).
González Gómez también figura vinculada a otras empresas por intermedio de la participación de Río Salado SA. Estas firmas son: Negocios y Servicios SA, Banco Continental, Itacuá Bienes y Raíces, Patria SA de Seguros y Reaseguros y Avalón Casa de Bolsa SA. Todas con capitales globales millonarios, según la documentación.
Activa participación
Lourdes Beatriz González Gómez también aparece ligada a cuatro entidades, algunas de ellas parecieran formar parte de federaciones masónicas. Según redes, promueven igualdad hombre y mujer además de perseguir fines altruistas.
Las organizaciones son: Asociación María Deraismes (2016), Asociación Luces de Orión (2018), Asociación Sabiduría y Concordia (2022) y Asociación La llama Sagrada (2022). Nuestro diario intentó en varias ocasiones obtener la versión de la abogada, pero no recibimos respuesta.
Compueblana del ministro de la Corte
Mariam Perla Gómez de González (80 años), madre de Lourdes Beatriz González Gómez es oriunda de Quiindy (Dpto. De Paraguarí), es decir, resulta ser coincidentemente compueblana del ministro de la Corte, Antonio Fretes. Otro punto sorpresivo es que Mariam Gómez figura en el año 2015 como síndico suplente de la empresa Monetare SA.
Registros comerciales, sin embargo, detallan que la mamá de la abogada González Gómez era empleada de una fábrica de fideos del país. Era la encargada de la elaboración de comprobantes.
Otros datos del sistema del Instituto de Previsión Social (IPS), incluso, detallan que Mariam Perla Gómez es jubilada dependiente del ente previsional.
Acompañamiento cercano
Directivos y empleados de la casa de créditos Ahoraité SA mostraron un acompañamiento cercano a Lourdes González, a quien calificaron como “amiga”, cuando se registró el fallecimiento de su padre Marcial González. Así lo muestran las dos participaciones funebres publicadas en febrero de 2019.
Propietaria también de vehículos e inmuebles
Lourdes Beatriz González Gómez (43 años), además de G. 8.066 millones en acciones a título personal en cuatro empresas conectadas al clan Fretes, tiene como activos una fortuna en bienes inmuebles y varios vehículos. Así lo revelan los datos de acceso público.
Con relación a las propiedades resulta imposible cuantificar los precios reales debido a que están localizadas en zonas exclusivas de Asunción. Para ejemplo están las tres fincas encontradas por nuestro diario en el sistema web del Servicio Nacional de Catastro (SNC).
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Dos de los inmuebles identificados con las cuentas corrientes catastrales números 13-459-5 y 13-459-6 están ubicados en el Distrito Santa María de la Asunción (ex Lambaré). Estas propiedades se ubican sobre la calle Dr. Esculies, en inmediaciones a la conocida quinta Bó, vivienda actual del presidente de la República, Mario Abdo Benítez.
Los lotes figuran con valores fiscales risibles de G. 13 millones y G. 128 millones, respectivamente.
La otra finca a nombre de González Gómez está situado en el Distrito de San Roque de Asunción. Se trata de la vivienda en la cual funcionaba la panadería de su padre y que históricamente declaró como dirección particular.
Oficina para trabajos “particulares”
Un punto curioso que revelan los registros comerciales es que Lourdes Beatriz González Gómez declaró como oficina para trabajos particulares la dirección Presidente Franco número 773 casi Ayolas. En ese sitio, coincidentemente, también está fijada la sede de la empresa Río Salado SA y la casa de préstamos Ahoraité SA, ambas ligadas al clan Fretes.
El inmueble, en tanto, figura en Catastro bajo la titularidad de Río Salado SA.
Lourdes González, además de tener millones en participaciones societarias y otros bienes, aparece patrocinando junto a Asdrúbal Fretes acciones ante la Corte Suprema de Justicia (CSJ). Un ejemplo específico se dio en noviembre de 2020 cuando la abogada junto al hijo del ministro de la Corte pidieron y obtuvieron de la máxima instancia judicial autorización para evadir la ley de obligación de presentar declaración jurada de bienes.
Hermano, procesado
Óscar Édgar González Gómez, de 56 años, hermano de Lourdes Beatriz González Gómez fue condenado en 2015 a 8 años de cárcel por estafa. En 2018 había conseguido la redención; sin embargo, desde el año pasado, es un prófugo de la Justicia, ya que la Cámara de Apelaciones revocó su libertad.
El proceso contra Óscar Gonzalez se inició en mayo de 2011 cuando la Superintendencia de Bancos ordenó que la casa de cambios Paraguay Express sea intervenida, luego de una denuncia presentada por las financieras Bríos y Finexpar, que fueron defraudadas por la suma de 305.000 dólares.
Ese año, el fiscal Miguel Vera Zarza imputó por el hecho punible de estafa a Óscar Édgar González Gómez y otros 4 accionistas de Paraguay Express; Alfredo Rafael Fretes Gill, Eustacio Sosa Lezcano, Teresa Raquel Montiel Larrosa y Patricio Vicente Arce Cabrera.
El 28 de mayo de 2015, el Tribunal de Sentencia, integrado por los jueces Sandra Farías, Wilfrido Peralta y Héctor Escobar, dictó la Sentencia Definitiva Nº 736 que condenó a cinco exdirectivos de Paraguay Express por los hechos punibles de estafa y conducta indebida en situaciones de crisis. En el juicio, se probó que cometieron un perjuicio por US$ 5 millones a firmas comerciales y a particulares, a través de compra y venta de divisas y otras operaciones cambiarias que la ley no les permitía.
Óscar Édgar González Gómez, accionista de la casa de cambios, fue condenado a 8 años de pena privativa de libertad. Sin embargo, en septiembre de 2018 la jueza de Ejecución Lourdes Scura (actualmente jubilada) lo benefició con la redención
En noviembre de 2018, la misma jueza Lourdes Escura dispuso que Óscar González Gómez cumpla su condena en arresto domiciliario.
Luego de la jubilación de Escurra, el caso quedó a cargo de la jueza María Teresa Ruiz Díaz, quien en febrero de 2020 revocó el arresto y ordenó que González Gómez vaya a la cárcel.
El 10 de mayo de 2021 la magistrada dictó la libertad condicional de González y esto fue revocado en agosto de 2021 por la Cámara. En setiembre de 2021, la jueza Sandra Kirchhofer ordenó la captura de González. La orden se reiteró en enero y noviembre de este año.
En agosto del 2020, Óscar Édgar Gónzalez Gómez y otros seis exdirectivos de la casa de cambios Paraguay Express también fueron condenados por lavado de dinero debido a que la fiscalía comprobó la colocación de ganancias ilícitas, provenientes del hecho punible de estafa, en varios bancos.