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La víctima del nuevo caso de feminicidio ocurrido en San Lorenzo fue Andrea Marlene Guerrero García, de 36 años, madre de cuatro hijos de 16, 15, 13 y 7 años, quien se dedicaba a la venta al menudeo de todo tipo de productos para ayudar en la mantención de la casa y la crianza de los hijos.
El presunto homicida fue su pareja Edgar Candia (42), electricista de profesión, empleado de una firma que realiza trabajos tercerizados para la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), quien prácticamente se dio por detenido luego de cometer el crimen, según confirmaron fuentes de la comisaría 31° Central.
De acuerdo con el relato de los allegados, Andrea se había fue a vivir muy joven con Edgar, seis años mayor que ella. La pareja vivía en la casa ubicada en la calle Campos del Paraguay casi Pierre Currie, en el barrio Anahí de la ciudad universitaria, donde tuvieron sus cuatro hijos.
Agresiones previas al feminicidio en San Lorenzo
Aparentemente, desde el comienzo de las relaciones la pareja tenía muchos problemas por cuestiones económicas y los celos del hombre, que se siempre desencadenaban en agresiones verbales y hasta físicas contra Andrea. Lamentablemente, estos hechos de violencia eran presenciados por los hijos de la pareja, según comentaron los vecinos.
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A mediados 2023 el hombre viajó a España para trabajar y tratar de mejorar los ingresos económicos de la familia, sin embargo, no aguantó mucho tiempo y antes de los seis meses regresó en diciembre de ese mismo año, señalaron los familiares.
Pero el día 18 de ese mismo mes, Edgar llegó a la comisaría 31° de Reducto para denunciar que fue brutalmente agredido por su hijo, que en ese momento tenía 15 años. Según comentarios de vecinos, en realidad el adolescente reaccionó en defensa de su mamá, que estaba siendo sometida a una de las acostumbradas agresiones del hombre.
A causa de este incidente, el mayor de los hijos de la pareja se vio obligado a abandonar la casa y mudarse con la abuela, en la ciudad de Lambaré.
Los problemas de violencia fueron aumentando y la convivencia se volvió casi imposible entre Andrea y Edgar hasta el punto que la mujer prácticamente se vio obligada a salir de su casa el 25 de diciembre para pasar una Navidad tranquila, mientras que el hombre se pasó el día buscándola.
En denuncia anterior, víctima advirtió que temía por su integridad física y la de sus hijos
A temprana hora del pasado 29 de diciembre, Andrea denunció en la comisaría 31° de Reducto que nuevamente fue víctima de amenazas y chantaje de parte de su pareja Edgar amenazó que se iba a suicidar si ella lo abandonaba. La denunciante dejó constancia que el mismo intentó hacerse daño nuevamente frente a ella y sus hijos, a las 23:00 del día anterior.
“Alega la recurrente que teme por su integridad física y la de sus hijos ya que cuando ella trabaja, sus hijos se quedan con él”, transcribe el reporte policial de la denuncia recibido a las 05:48 del 29 de diciembre.
Esta denuncia fue comunicada por nota el día 30 de diciembre a la agente fiscal de la Unidad 6 de San Lorenzo María Genoveva Figueredo. Aparentemente, tanto la Fiscalía como el Juzgado no llegaron a reaccionar sobre el caso, ya que no se encontraron resoluciones al respecto en la comisaría jurisdiccional, confirmó el comisario Fernando Echeverría, subjefe de la 31° Central.
Finalmente, poco antes del amanecer de hoy nuevamente comenzó una discusión entre ambos y Edgar concretó sus amenazas. Tras una revisión en el lugar, el forense confirmó que la víctima sufrió un fuerte golpe en la cabeza y que luego la atragantaron con una toalla.