Cargando...
La banda internacional de tráfico de drogas aludida estaría dirigida por los hermanos Sabino Ayala, de 36 años, y Edison Ayala, de 34 años, ambos paraguayos, cuyas detenciones fueron sugeridas al fiscal de Narcotráfico de Pedro Juan Caballero, Celso René Morales Fernández.
Ambos lograron escapar el domingo último de una operación efectuada por agentes especiales y militares de las fuerzas especiales de la oficina regional 1 de la Senad.
La intervención se llevó a cabo en una estancia situada en las coordenadas 23º 34′ 03″ S, 55º 41′ 33″ W, en la colonia Cadete Boquerón, distrito de Capitán Bado, departamento de Amambay.
En el sitio, los uniformados encontraron una camioneta Ford F250 negra en cuya carrocería había varios paquetes de marihuana que debían ser movidos del lugar, entre otras evidencias.
El hallazgo en el monte y el escape
Los antidrogas, que ya venían investigando a la banda, se dirigieron posteriormente a un monte colindante donde encontraron un enorme campamento marihuanero equipado con todos los elementos necesarios para producir al menos cinco toneladas de marihuana prensada por día.
De hecho, en el sitio fueron encontradas ocho toneladas de la droga, aunque en distintas presentaciones, como semilla, picada, prensada e incluso ya envasada al vacío.
Cuando los agentes especiales y militares de las fuerzas especiales se estaban dirigiendo hacia el campamento se cruzaron con dos presuntos miembros de la red, Orlando Ramón Balbuena Saavedra, paraguayo, de 33 años, y Bruno Barros Da Silva, brasileño, de 28 años, quienes estaban en una camioneta Fiat Strada.
Los dos hombres intentaron usar sus pistolas contra los antidrogas y antes de ser reducidos ganaron el tiempo suficiente para permitir el escape de los que serían sus jefes, los hermanos Sabino y Edison Ayala, según los datos obtenidos.