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Lourdes Bobadilla, fiscala del caso en el que más de 60 compradores de autos fueron estafados y se quedaron sin sus vehículos por ordenes judiciales, explicó que a partir del desafuero de Jorge Adolfo Franco Garelik, juez de Nueva Asunción (ex Chaco`i), podrá actuar con mayor libertad en diligencias que profundicen en la investigación.
A partir de ahora podrían surgir más hipótesis por la manera de operar del Juzgado y de la playa de autos “Steven Automotores” de Ñemby que fueron denunciados, señaló la agente fiscal en ABC AM 730. Franco está imputado en principio por prevaricato y asociación criminal, pero no descarta investigarlo por otros hechos punibles.
De producirse un juicio contra el exmagistrado y en base al concurso de los delitos, el procesado podría ser condenado con una pena de entre ocho y nueve años, según Bobadilla. La actuaria Gabriela Noemí Gaona también está imputada.
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“Está imputado por prevaricato ante el hecho de favorecer a la playa de autos con selectividad y celeridad. Todos los procesos eran mediante juicios ejecutivos”, sostuvo. Agregó que siguen comunicándose más víctimas, por lo que la cifra de estafados podría llegar a 200.
El esquema funcionaba, aparentemente, desde el momento en que el Juzgado de Nueva Asunción emitía ordenes de secuestros de los vehículos porque los compradores tenían el retraso en una cuota, debido a que no adquirieron sus autos al contado.
Dueños de playa de autos siguen prófugos
Además de Franco Garelik también están investigados Denis Steven Bareiro y su padre Carlos Bareiro (ambos prófugos). Serían los propietarios de la playa.
La fiscala mencionó que pretende saber conocer cuál es la representación que tienen en la empresa para decidir sobre los contratos de compra y venta.
“Cuando el desaforado esté a disposición, podemos hacer actos en su caracter de procesado. Ahora aguardamos que el Juzgado fije fecha para la imposición de medidas cautelares”, concluyó.