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Minutos después de las 9:00 de este jueves llegó a sede de la Fiscalía contra Delitos Informáticos el suboficial Javier Vallejos, uno de los tres policías detenidos en la causa que investiga la manipulación del sistema informático de la Interpol para dar de baja las alertas rojas de personas vinculadas a Sebastián Marset.
Para esa misma hora estaba fijado el inicio de audiencias con la fiscala Ruth Benítez, además de los tres detenidos: el oficial segundo Javier Vallejos, la oficial ayudante Gabriela Vasos y el suboficial ayudante Kevin Eduardo Montiel, en cuyo domicilio se encontraron varios elementos que lo vinculan con la causa.
Además, fueron llamados a declarar otras tres personas, entre ellas el comisario Víctor Hugo Flores, recientemente destituido como subjefe de la Interpol.
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Interpol: alteraciones se dieron en tres momentos
La fiscala Irma Llano dio más detalles con respecto a los datos obtenidos hasta el momento de la investigación, confirmando que las alteraciones se dieron en tres momentos: en julio de este año, en agosto y la última en septiembre.
“La esposa de Marset tenía dos órdenes de captura internacional y en julio levantan la primera”, explicó la fiscala. “En agosto levantaron con relación a José Estigarribia y en septiembre levantan la última orden de captura internacional contra Gianina”, explicó.
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Documentos respaldan que sospechosos dieron de baja la alerta
Con respecto al usuario que se utilizó para estas operaciones, la fiscala reiteró que se utilizó “un usuario que hace tiempo estaba vigente y que en un principio estaba vinculado a un subcomisario, pero que después también estuvieron usando los ‘superusuarios’”, dijo, admitiendo que era el usuario de Hugo Flores.
Consultada sobre cómo sabe que fueron los dos hombres y no la mujer los que hicieron estas alteraciones, explicó que cuentan con documentación encontrada en Paraguay para afirmar eso. “La registración de Gianina se da a través del mismo usuario y firma una de las personas que hoy está detenida”, aclaró.
En relación a las comunicaciones dadas desde Francia, dijo que “ellos comunican que al día siguiente se informa una alerta diaria, donde ellos comunican lo que está dando de baja”.
La fiscala confirmó nuevamente que el suboficial ayudante Kevin Eduardo Montiel compró un vehículo con posterioridad al primer borrado, por alrededor de unos G. 30 millones, señalando que se trata de un vehículo de la marca Toyota. A pesar de estos datos, la fiscal señaló que trabajan para demostrar que estas personas recibieron algún tipo de beneficios por sus “servicios”.