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Los afectados son Nimio David Godoy Cristaldo, de 45 años; Miguel Gregorio Giménez Sosa, de 48 años; Fidel Castillo Rojas, de 54 años; Guillermo Raúl Ramírez Galeano, de 30 años; y Mauricio Ysmael Enciso, de 24 años.
Los cinco hombres van a guardar reclusión en la penitenciaría regional de Concepción, mientras avanza el proceso en su contra por abigeato, reducción, asociación criminal y transgresión a la ley de armas, que son los cuatro hechos imputados por el fiscal de la causa, Félix Andrés Cantaluppi González.
El grupo fue capturado el miércoles último en un corte de ruta en la localidad de Toro Pampa, que queda a 65 kilómetros de la ciudad de Fuerte Olimpo, que a su vez es la capital del departamento de Alto Paraguay, en el Chaco paraguayo.
El procedimiento fue efectuado por policías de la oficina regional 12 del Departamento de Lucha Contra el Abigeato, que funciona justamente en Toro Pampa y cuyo jefe es el subcomisario Carlos Alberto Céspedes Romero.
¿Cómo supieron del caso del robo de búfalos?
Los citados agentes interrogaron a los sospechosos y estos los condujeron hasta un punto de la estancia Las Margaritas, donde tenían tambeados dos búfalos y dos vacas que no llegaron a faenar porque aparentemente se enteraron de que había un despliegue policial en la zona.
Los animales localizados habían sido recientemente arreadas de la estancia vecina, Periquito, de la cual aparentemente venían robando sistemáticamente decenas de vacas y búfalos.
De hecho, en un recorrido por el lugar, los policías hallaron el aguantadero de la banda, pero ya en el predio de la estancia vecina Kokue’i, donde a su vez fueron encontrados los restos de al menos otros 16 animales ya faenados, entre vacas y búfalos, algunas incluso que estaban preñadas.
El subcomisario Céspedes dijo que el cabecilla sería Nimio David Godoy, en cuya camioneta estaban los ahora detenidos. Este es un enfermero de Fuerte Olimpo que aparentemente levantaba los pedidos de las carnicerías de la ciudad y que luego mandaba robar los animales.
Miguel Gregorio Giménez es el capataz de la estancia Las Margaritas y supuestamente permitía que los animales robados de Periquito sean escondidos en su propiedad para ser faenados.
Fidel Castillo, Guillermo Raúl Ramírez y Mauricio Ysmael Enciso serían los encargados de cazar y faenar los animales en los potreros, siempre según el jefe Céspedes.