Cargando...
Adictos a las drogas ingresaron a la Escuela Básica 5.582 San Agustín del barrio Cerrito de San Antonio y quemaron varios muebles, como sillas con pupitre y armarios.
Los inadaptados forzaron primeramente las puertas con la idea de ingresar a las aulas, pero como no pudieron rompieron los vidrios de los balancines y quemaron las cortinas.
El fuego afectó la pared y varias sillas pedagógicas. Además, los inadaptados rompieron también fluorescentes.
Lea más: Inseguridad: Intendente de Pedro Juan pide a Peña que haga algo antes que sea demasiado tarde
Intentaron quemar toda la escuela
La intención de los adictos era quemar gran parte de la institución, debido a que varias ventanas de diferentes aulas fueron violentadas y las cortinas quemadas.
Una de las direcciones del colegio fue la más afectada, pues allí fue incinerado un armario que contenía todos los documentos de la casa de estudios.
“Quemaron el armario que contenía todo el archivo de la institución, todos los documentos del colegio y varios muebles, el daño es enorme”, expresó la directora, Patricia Enciso.
Lea más: “Chau Chespi”: Usarán datos de información policial para registrar a adictos
“Señal de sangre”
Por otra parte, la pizarra de una de las aulas fue pintada con pintura roja, que según los padres es “señal de sangre”.
“Esto es una clara señal de los adictos de que están declarando la guerra, y en estas condiciones no podemos enviar a nuestros hijos, y más porque no tenemos apoyo de la Policía “, lamentó uno de los padres, Blas Sánchez.
Agregó que en varias ocasiones advirtieron de la presencia de los adictos en la zona y denunciaron que mantienen en zozobra a toda la población. Los moradores indicaron que en el barrio se comercializa la droga y que muchos estudiantes ya cayeron en las adicciones.
Los padres reclaman que la institución solo cuenta con tejidos y los adictos cortan e ingresan para consumir estupefacientes dentro del local.
Este hecho de vandalismo se habría registrado entre la madrugada de ayer sábado. La limpiadora se percató del siniestro en la tarde de hoy, cuando llegó para la limpieza.
“No tenemos apoyo de la Policía local, varias veces solicitamos el apoyo, porque el barrio está lleno de adictos y esta es la consecuencia”, expresó una madre, María de Valenzuela.