Uno de los afectados por esta ola de delincuencia es Miguel Darío Sanabria Giménez (20), quien el pasado 6 de setiembre denunció ante la comisaría 4° de Atyrá el robo de una motocicleta Taiga LT 150-2T de color negro año 2022 y matrícula 408 AAPN, perteneciente e Edward Moisés Aguirre Martínez (20).

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El dueño del biciclo declaró que a las 19:00 horas de esa fecha prestó la motocicleta a su amigo para participar de un encuentro de futsal en la Municipalidad local y que cuando regresó al lugar donde la dejó, Sanabria se encontró con la sorpresa de que ya no estaba allí.

También refirió en la denuncia que había cámaras de circuito cerrado por el lugar, las cuales registraron que cerca de las 20:36 se captó a dos jóvenes de sexo masculino cuando abordaron el biciclo y se retiraron del lugar, con rumbo desconocido.

Otro detalle llamativo es que la Municipalidad de Atyrá, en cuyas inmediaciones se produjo el hurto del biciclo, está prácticamente al lado de la comisaría 4° local.

Inseguridad total

La madre de Edward Aguirre Martínez, dueño de la motocicleta robada, manifestó que Atyrá se convirtió en “tierra de nadie” por la proliferación de robo de motocicletas registrados últimamente y reclamó una mayor presencia policial en la ciudad, sobre todo de agentes del Grupo Lince

“La ciudad de Atyrá se está convirtiendo en tierra de nadie. En menos de seis meses a mi hijo le robaron dos motocicletas. Estamos totalmente inseguros y desprotegidos. Necesitamos más presencia policial, sobre todo cuando los chicos están participando de actividades. No hay patrulleras, no están custodiando y hay pocos efectivos en la comisaría”, indicó la angustiada madre.

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Indicó que después del cambio de director de Policía en Cordillera aumentó la delincuencia y que impera la inseguridad total.

También señaló que estos jóvenes que fueron captados por las cámaras de circuito cerrado son de Caacupé y que la Policía los tiene bien identificados, pero igual no muestran interés en capturarlos.