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Adictos a las drogas mantienen en zozobra a las autoridades del hospital distrital de la localidad de Ñemby y a los pacientes que acuden de noche. En los últimos días ya robaron hasta los cables de la cámaras de circuito cerrado y caños de los acondicionadores de aire.
Hoy el centro asistencial amaneció sin agua, porque los delincuentes se llevaron el medidor del vital líquido. Debido a este problema, el edificio estaba sin este servicio durante toda la mañana, según explicó su director general, doctor Nilton Torres.
“La inseguridad que vivimos en el hospital es total. Ayer robaron el caño del aire acondicionado del laboratorio, y hoy nos llevaron el medidor del agua que estaba dentro del predio. A consecuencia de eso no tuvimos agua durante toda la mañana”, expresó el director.
Desde hace un tiempo sufren hurtos
Dijo que semanas atrás sufrieron robos de segmentos de cables de cámaras de seguridad que actualmente no estaban funcionando, debido a que algunos equipos ya fueron hurtados anteriormente, y de artefactos de iluminación del edificio.
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El director recordó que el 4 de setiembre pasado, un adicto intentó robar un televisor de la sala de espera, monitor que se utiliza para las llamadas a los pacientes, pero fue sorprendido y se dio aviso a la policía, que atrapó al supuesto ladrón.
Utilizan pasillos y bancos para “descansar”
Los adictos llegan al hospital todas las noches y se instalan en los pasillos. Utilizan los bancos para supuestamente descansar, sin embargo es solo para aprovechar la ocasión y llevarse algún artefacto.
Temen perjuicio a sala de oxígeno
“No contamos con guardia de seguridad, y estos adictos ingresan y se ubican en los pasillos y bancos para descansar, pero luego ante un pequeño descuido ya llevan cualquier cosa, y aunque son pequeñeces, nos afecta”, expresó el galeno.
Dijo que su principal temor es que estos adictos llegan a cortar los caños de la sala de oxigeno y ahí todo el hospital quedará sin este servicio, incluyendo al área neonatal, que utiliza oxígeno en forma permanente.
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Aprietan a pacientes
El director comentó además que los adictos aprietan en el mismo interior del edificio a los pacientes y exigen dinero. Por este motivo, los afectados ya no quieren llegar al centro asistencial en las horas nocturnas.
“Recibimos las denuncias de los pacientes de que son víctimas de estos adictos que se instalan en los pasillos, y a la hora de dirigirse al laboratorio, que está en la parte posterior, son objetos de aprietes. La verdad que nos incomoda esta situación”, expresó Torres.
Reconoció el apoyo de la policía local, que realiza los recorridos en forma permanente. No obstante añadió que se precisa de un guardia de seguridad privada para precautelar la integridad de pacientes y trabajadores.
Comentó que las autoridades del Ministerio de Salud ya están al tanto de esta incómoda situación que atraviesan a consecuencia de la presencia masiva de adictos en la zona.