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El supuesto narcotraficante Julio César Duarte Servián, puesto en reclusión domiciliaria por los jueces Víctor Hugo Alfieri, Gloria Hermosa y Dina Marchuk, integrantes del Tribunal de Sentencia Especializado contra el Crimen Organizado N° 3, está vinculado fuertemente con el secuestro y asesinato de Vicente Arsenio Centurión Ramírez.
El comisario Nimio Cardozo, jefe de Antisecuestros de la Policía Nacional, explicó que si bien en el caso que investigan cuentan con elementos que demuestran que una tercera persona es la que recibió el dinero de la recompensa de parte del hijo del secuestrado, este habría entregado a su vez parte del dinero a Duarte Servián.
Cardozo contó en comunicación con ABC Cardinal AM que las cámaras de circuito cerrado del shopping donde se entregó el dinero del rescate muestran a esta tercera persona recibiéndolo y esta, a su vez, en anticipo jurisdiccional de pruebas, declaró ante el juez penal de Garantías que llevó el dinero a la celda de Duarte Servián en la Agrupación Especializada.
Cardozo comentó que cuentan con documentos que probarían que este tercero había visitado a Duarte Servián tal y como dice su testimonio, tras lo cual habían allanado su celda e incautado elementos probatorios. Cardozo recordó también que el cuerpo de Vicente Arsenio Centurión Ramírez fue encontrado meses atrás al costado de un camino vecinal en General Artigas, Itapúa, y todavía esperan los resultados de la autopsia.
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El secuestro del cambista
El cambista Vicente Arsenio Centurión Ramírez fue secuestrado el 3 de agosto de 2022. Los captores habían solicitado la entrega de US$ 800.000 que supuestamente la víctima les debía.
El secuestro fue denunciado el 8 de agosto de 2022 ante la Policía y la Fiscalía por José Carlos Centurión Ramírez, hijo de la víctima, quien dijo que el hecho ocurrió a las 23:00, en la ciudad de Villa Elisa.
El denunciante refirió que recibió una llamada en su celular, de voz masculina, en que le mencionaban que tenían a su padre en cautiverio en Bolivia porque el mismo tenía una deuda con ellos por la suma de US$ 800.000, y que ellos le estarían dando la responsabilidad en Paraguay para que “solucione el problema”.
Los secuestradores también le habrían dado la opción de ofrecer como garantía una propiedad inmueble, porque daban un plazo de 24 horas para pagar dicho monto. Además, le encargó al hijo de la víctima que pague la deuda de su padre y mencionaron el lugar donde dejaron abandonada la camioneta de la víctima, un vehículo de la marca Toyota modelo Fortuner, año 2021.
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La prueba de vida
El día viernes 5 de agosto de 2022, a las 10:15, el hijo de la víctima recibió mensajes vía WhatsApp y también se envió una fotografía de su padre sentado en una cama con los ojos vendados y le mencionó que tenía hasta el final de ese día para pagarle su dinero o, de lo contrario, mataría a su padre y a toda su familia, conforme consta en el expediente de la causa.
A las 10:29 de ese viernes, José Centurión le contestó que no era a su padre al que estaban buscando sino a otra persona de nombre Mariano Lambaré (un comisario que estuvo en la oficina regional de Narcóticos de la Policía), quien supuestamente tenía su dinero y que este era el responsable de todo, y le envió las fotografías de esta persona. El secuestrador solicitó los datos exactos de “ese perro”, refiriéndose a Lambaré, y a la vez insistió en que consiga unos US$ 70.000 para las 16:00 de ese día 5 de agosto de 2022.
Los secuestradores enviaron una fotografía de Vicente Centurión Ramírez de rodillas en el piso sanitario, totalmente desnudo, con las manos atadas al piso y con una pistola de color negro apuntándole a la cabeza, con la advertencia de que si hacían algo indebido matarían a la víctima. La entrega del dinero solicitado se realizó el 5 de agosto a las 19:42 en el Shopping Mariano, a una persona que se identificó como “César”, a quien entregaron el bolsón con los fajos.
A las 21:17 del mismo día, José Carlos Centurión recibió un audio de WhatsApp en que le hacían hablar al secuestrado y en que pedía que consiga más dinero y que lo entregado era apenas el 1 por ciento de lo que él debía. Minutos más tarde, enviaron otro video en que se observaba a una persona agarrándole del cabello a la víctima, con el torso desnudo.
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El operativo Status
En el año 2020, el Ministerio Público y la Policía Federal del Brasil realizaron una serie de allanamientos simultáneos en Amambay y en el Brasil, que tenía como objetivo desmantelar una red criminal dedicada al narcotráfico y lavado de activos con asiento en ambos países. La organización estaría liderada por el clan familiar García Morínigo.
En setiembre de ese año, los fiscales Deny Yoon Pak, Ysaac Ferreira y Eduardo Royg imputaron a Julio César Duarte Servián por lavado de dinero, lavado de dinero proveniente del narcotráfico y asociación criminal para el lavado de dinero proveniente del narcotráfico.