El abogado de la auxiliar fiscal Claudia Guillén, involucrada en un presunto caso de “blanqueamiento” de vehículo robado en Brasil, presentó documentos varios que demuestran la supuesta legalidad de la camioneta Toyota Hilux denunciada como robada.

Uno de los documentos es un presunto contrato de compraventa del rodado, que tiene como vendedor a un hombre ya fallecido. Se trata de Roque Ismael Cabral Sánchez, quien según los papeles de la defensa de la funcionaria del Ministerio Público, vendió el 19 de noviembre de 2022 la camioneta por G. 280 millones a Ramón Alberto Guillén Ortiz, padre de Claudia, hoy detenida.

Lo llamativo es que la viuda del supuesto vendedor, Liza Santander, afirma que usaron la identidad de su marido en el contrato para “blanquear” el vehículo. Su esposo falleció hace 17 días.

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“Parece una película de terror”, dice viuda

“La firma no es la de mi esposo, esa es falsificada. No se parece a la de él”, manifiesta.

Cabe mencionar que si bien el número de cédula del documento coincide, el apellido del hombre está puesto de forma diferente, anteponiendo el primer apellido con el segundo. También se pudo comprobar que no existe homonimia ni otro número de cédula que coincida con el mismo nombre y el apellido Sánchez Cabral, como aparece en el documento.

El documento tiene fecha del 19 de noviembre del 2022 y coincidentemente, días antes, más específicamente el 8 de noviembre Roque Ismael Cabral junto a su esposa Liza Santander habían entregado un vehículo como parte de pago en una playa de venta para retirar un auto de la marca Toyota Vitz a nombre del hombre.

Se trata de una playa de venta de vehículos ubicada sobre la avenida Choferes del Chaco, en la capital del país.

La mujer asegura no conocer a Ramón Alberto Guillén Ortiz, padre de la auxiliar fiscal, y manifiesta que acercará a la Fiscalía los documentos para que se aclare el caso.

“Voy a accionar de alguna manera. Me duele tanto lo que está pasando. Él nunca tuvo camioneta, no vendió ni compró”, insistió en conversación con ABC Color.

Roque Ismael Cabral Sánchez era arquitecto y docente; ya estaba jubilado pero seguía dedicándose a la docencia, comentó su esposa, que agregó que nunca tuvieron una vida de lujos.