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La ley N° 3966/10, Orgánica Municipal, establece que las municipalidades son encargadas de establecer reglamentaciones y aplicar las normas de protección acústica.
En este sentido la Municipalidad de Pilar, aplicó mediante una ordenanza prohibir todo hecho de polución sonora y consumición de bebidas alcohólicas en las las plazas y espacios públicos, dejando sin alternativas a los jóvenes que buscan en esta época celebrar con bebidas, músicas y bailes.
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A esto se suma el trabajo de la defensa costera en toda la extensión de la playa del arroyo Ñeembucú y del río Paraguay, por lo que no existe un lugar para que los jóvenes celebren con sus automóviles tuneados con cajas y parlantes de gran potencia, a más de la música a todo volumen.
Ante esta situación, los mismos encontraron una manera particular de celebrar fuera del centro urbano de la ciudad sin molestar a ningún vecino, pero poniendo en peligro sus vidas y de los automovilistas que cruzan por el lugar. El festejo se realizó sobre la nueva ruta PY19 en la zona norte, cerca de la nueva circunvalación que conecta con la ruta de Alberdi.
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Allí los jóvenes desataron toda su alegría en forma desenfrenada, con músicas, bebidas y baile en plena ruta PY -19 sin medir el peligro que significa estar ahí, debido a que es oscuro y no se cuenta con ninguna medida de seguridad.
Piden que Policía Nacional y Ministerio Público actúen
El concejal municipal Diosnel Aguilera (PLRA) admitió las falencias con que cuenta el municipio debido a la construcción de la defensa costera y que una de las razones, es que no se tiene un espacio físico para que los jóvenes puedan celebrar algún evento.
“Nosotros tenemos una dificultad en este momento debido a la construcción de la defensa costera y aún no tenemos un espacio destinado para un encuentro juvenil. De hecho que es una situación que viene generando inconvenientes en el casco urbano, principalmente porque al derecho de divertirse de las jóvenes está el derecho de descansar de los vecinos”, expresó el edil.
Detalló que permanentemente en el seno de la Junta Municipal reciben a vecinos de diferentes barrios, que denuncian y se quejan sobre la polución sonora, a más del desborde y la suciedad que dejan en las veredas.
“A raíz de esta situación no les queda otra opción a los jóvenes, porque en la plaza la policía está controlando permanentemente y también se hace cumplir la ley que prohíbe el consumo de bebidas alcohólicas en la vía pública . En nuestra plaza acuden muchas familias, niños, adultos mayores y por eso queremos reservar esos lugares más para la familia”, resaltó Aguilera.
Comentó que los jóvenes se ingenian para divertirse. “Los jóvenes se rebuscan en las dos circunvalaciones, uno hacia la salida de Isla Umbú y otro sobre la ruta PY 19. El control debe hacer la Policía Nacional, junto al Ministerio Público, porque el tránsito se vuelve peligroso y sólo así se puede evitar víctimas que lamentar”, refirió.