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La fiscala Gladys González encabezó un allanamiento en una vivienda en Lambaré, por un caso de falsificación de documentos, según comentó a ABC Cardinal. El caso podría estar relacionado al crimen organizado, conforme a los intervinientes.
Según comentó, un personal policial falsificó un documento de vida y residencia de ciudadanos rumanos para gestionar la licencia de conducir en nuestro país. “Un oficial falsificó una firma para la vida y residencia de unas personas rumanas que iban a sacar su licencia de conducir pero se constata que no corresponde al número de cédula”, comentó.
Mencionó que solicitó a la Interpol la verificación de las identidades de los ciudadanos rumanos, para saber si existen en la base de datos o son identidades inventadas. Según adelantaron, estas personas, para quienes se crearon los registros falsos, no existen en el sistema.
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Opaci reportó irregularidades
González explicó que fue una funcionaria de la Organización Paraguaya de Cooperación Intermunicipal (OPACI) la que envió un reporte sobre dos solicitudes de registro de conducir cuyos certificados de vida y residencia no contaba con la firma del jefe o subjefe de la comisaria donde fueron emitidos.
Contó que el gestor envía los documentos a la oficial de la comisaría, quien elabora en minutos el certificado de vida y residencia y vuelve a remitirla al gestor, que a su vez envía el documento a la Municipalidad.
El funcionario municipal remite este certificado a la Opaci y es allí donde verificaron que el número de cédula no corresponde a la persona que estaban solicitando las licencias. “Ahí es donde no se puede concretar la elaboración del registro”, subrayo.
Esta información fue derivada a la comisaría donde se prepararon los documentos y el jefe de esta dependencia fue quien hizo la denuncia que derivó en la investigación.
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Vinculado al crimen organizado
El procedimiento contó con el apoyo de efectivos de la Interpol y otras dependencias policiales. Sobre el tema, el comisario Juan Ferreira de la Comisaría 4ta. mencionó que tres personas quedaron aprehendidas durante la intervención: una oficial de la Policía, un gestor y otro hombre que estaría involucrado.
El comisario detalló que, en principio, se tienen indicios de que hubo falsificación de documentos públicos y otros delitos que “podrían tener vinculación con el crimen organizado”.
“Tratándose de ciudadanos extranjeros, hay dudas al momento de que estén actuando de mala fe y hay presunción de que hay hechos delictivos”, acotó.
Según explicó, el “gestor” alquilaba una pieza en el inquilinato allanado, de donde fueron incautados varios documentos que la Fiscalía determinará si tienen valor.
Oficiales y funcionarios de la comisaría son investigados
También comentó que estarán determinando el grado de complicidad que tuvieron los funcionarios policiales. Es una mujer policía de la Comisaría 4ta. quien está sindicada como parte del grupo de falsificadores.
Ferreira mencionó que los documentos que llamaron la atención y derivaron en la denuncia, son unos certificados de vida y residencia que no llevaban la firma del jefe o subjefe de la comisaría.
Un oficial primero, un oficial segundo y otros dos funcionarios de la comisaría también están siendo investigados, según indicó.
Cooperación de Interpol
Por su parte, el comisario Oliver Fernández de Interpol Paraguay, manifestó que no cuentan con las cédulas de identidad de los ciudadanos rumanos para quienes se solicitaron las licencias de conducir.
Indicó que todas las gestiones de los documentos se hicieron vía WhatsApp por lo que nunca se tuvo constancia física de la existencia de dichos documentos.
“Solamente se realizaba con imágenes de WhatsApp, el gestor le pasaba a la funcionaria, esta le pasaba a otra funcionaria y así confeccionaban el tema del registro de conducir”, contó.
Afirmó que los números de cédula registrados en las licencias pertenecen a otras personas, que son de nacionalidad paraguaya.