Cargando...
La apoderada general del colegio privado de Lambaré, que fue foco de polémica el mes pasado, envió el viernes dos notas dirigidas a la jueza de la Niñez y Adolescencia, María Teresa Cardozo, y a la fiscala Myriam Rodríguez, para insistir en el pedido de conocer la identidad de los presuntos agresores de un niño dentro de las instalaciones de la institución educativa.
El pedido fue reiterado luego de que el viernes pasado la presunta víctima haya sido sometida a la prueba en la cámara Gesell. El colegio primero realizó la solicitud al Juzgado, que mediante una providencia de fecha 30 de mayo respondió que se debe recurrir a la Fiscalía.
Lea más: Abuso sexual: colegio de Lambaré pide a Fiscalía que identifique a agresores
Ante esto, el colegio trasladó dicha petición al Ministerio Público, mediante una nota presentada el 31 de mayo de 2022. En el mismo documento, también solicitó a la Fiscalía conocer cuándo comunicará la identidad de los presuntos agresores al Juzgado de la Niñez y al MEC para su intervención.
Además, las autoridades de dicha institución solicitan la aclaración del tipo de abuso o agresión supuestamente producido, alegando que es de suma importancia porque la exposición pública del caso generó diferentes versiones. “Esto provocó una comprensible preocupación en nuestros padres de familia, quienes temen que en el colegio puedan existir agresores sexuales que habrían sido identificados el 9 de mayo, según las declaraciones públicas del fiscal”, alegan desde la institución educativa.
Lea más: Imputan a directora, coordinadora y docente de colegio privado de Lambaré
Finalmente, reiteran que el pedido es “urgente y pertinente” debido a que ya se encuentran con clases presenciales y trabajando en las mejoras propuestas por el Ministerio de Educación para dar máxima seguridad a los estudiantes.
Según la denuncia presentada por los padres de la presunta víctima, dos estudiantes habrían abusado sexualmente de un alumno de 6 años dentro de un colegio de Lambaré, el 26 de abril pasado. Las autoridades habrían intentado ocultar el suceso y no activaron los protocolos a tiempo.
Por ese motivo, Carolina Urbieta, Olga Feltes y María Gabriela Santiviago, directora, docente y coordinadora del colegio, fueron imputadas esta tarde, por los hechos punibles de violación del deber de cuidado. En el caso de Urbieta, por frustración de la persecución penal.
Lea más: Estos son los patrones que podrían ayudar a identificar a un agresor o víctima de violencia escolar