Cargando...
Muchas músicas latinas que promueven el alcohol, la droga o el sexo como fuente de entretenimiento, al parecer, van subiendo sus peldaños, pues es común escuchar en las fiestas o cumpleaños canciones con estrofas que hacen alusión al total descontrol. El “cuando calienta el sol” o “pintarse la cara, color esperanza” fueron atrozmente reemplazados por expresiones que dicen “a mí me gustan los más grandes, que no me quepan en la boca”, “si te lo pongo es pa’ recordar un tbt” y otras frases que son repudiadas por mucha gente.
El trasfondo de algunas letras musicales refleja el pensamiento machista de muchos artistas, pues se escriben canciones en las que se apuntan a las mujeres como objeto de diversión para un hombre y también viceversa. Muchos aseguran que la música, algunos años atrás, expresaba buenos sentimientos del compositor y, además, sus melodías dejaban un mensaje, ¿por qué ya no están de moda estas clases de hits?
El trap es un género musical que, hoy en día, está en auge por su ritmo pegadizo; aunque este género ya se conocía en los año '90, el reinvento del trap tiene un contenido más explícito y callejero. Asimismo, el reguetón también viene de la mano con este estilo, ya que ambos mencionan el descontrol y la locura en sus estrofas.
“Si antes yo era un hijo…, ahora soy peor” expresa uno de los temas que más suenan en las emisoras; con millones de reproducciones en YouTube, el género musical trap arrasa con todo en muchas parte del mundo. Imaginate que los jóvenes y niños estén tarareando letras con expresiones groseras a cada rato.
Los máximos exponentes del género más criticados y, a la vez, más escuchados son Bud Bunny y Maluma, quienes con cada single musical que lanzan aumentan su popularidad. Las opiniones negativas de artistas ya se sumaron, ya que en una entrevista, la cantante Selena Gomez afirmó que nunca haría una colaboración con Maluma, pues ella está a favor del empoderamiento de las mujeres.
Claro, da gusto cantar y escuchar música, pues las melodías son el alma de las fiestas, pero si nosotros somos los que consumimos y ponemos a la moda canciones que denigran al sexo femenino y que promueven malos comportamientos, ¿qué clase de pensamiento juvenil nos espera?
Por Ezequiel Alegre (17 años)