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El coronel Rafael Franco asumió la presidencia el 17 de febrero de 1936, mediante un golpe de Estado militar; reemplazó al entonces mandatario Eusebio Ayala, acabando así con la hegemonía del Partido Liberal, que había estado en el poder por más de dos décadas. Muchas personas afirman que, aunque esa no fuese su intención, mediante el golpe que colocó en la silla presidencial a Franco, se inició la etapa de los gobiernos militares que, posteriormente, desembocó en la dictadura del general Alfredo Stroessner.
La revolución de 1936 marcó un antes y un después en nuestra historia; es cuestionable la manera en que Franco logró la presidencia, pero hay que admitir que, durante su breve gobierno, se realizaron múltiples obras y se obtuvieron varios logros para el pueblo paraguayo. El hecho de que hoy trabajemos ocho horas diarias, cobremos un aguinaldo y descansemos los domingos se lo debemos al presidente Rafael Franco.
Así también, él estableció la terminación del Oratorio de la Virgen de la Asunción y lo denominó “Panteón Nacional de los Héroes”. Posterior a eso, el presidente Franco rescató los restos del Mcal. Francisco Solano López y del Tte. Adolfo Rojas Silva y los ubicó en la obra recientemente terminada. Además, enalteció la figura heroica del Mcal. López y declaró como feriado nacional la fecha 1 de marzo.
La reforma agraria es un tema recurrente en los debates políticos e incluso en las rondas de tereré entre los conocedores del tema y la gente común. Lo cierto es que el coronel Franco llevó a cabo la primera reforma agraria en el Paraguay; cerca de 10.000 familias fueron beneficiadas y lograron acceder a las propiedades de hasta 50 hectáreas. El Gobierno les vendió las tierras con título, a un plazo de 15 años y cinco de gracia para pagar los impuestos.
Un hecho que cabe resaltar es que Franco nunca olvidó a sus camaradas y compañeros militares; de hecho, entregó condecoraciones y ascendió a varios oficiales del Ejército. Además, estableció pensiones a los lisiados y excombatientes que dejó la Guerra del Chaco, mantuvo la postura de no ceder ningún territorio ganado durante la contienda bélica y creó la Asociación Nacional de Excombatientes, hoy día, UPV Chaco.
La salud pública era una prioridad en ese entonces para el Presidente, cosa que hoy no pasa; por eso, Franco creó el Ministerio de Salud Pública y mandó construir varios hospitales en el interior del país. Así también, se le atribuye la creación de las facultades de Odontología, Economía y Ciencias Agrarias en la UNA, además de múltiples asociaciones sindicales como la Central Nacional de Trabajadores, el Comité de Movilización Civil y la Unión Nacional Feminista.
Un hombre recordado como muy honesto, humilde y sencillo, que vivió en el exilio durante más de 20 años. Tal vez no es tan conocido por la generación actual de jóvenes, pero es considerado por muchos historiadores como uno de los mejores presidentes que tuvo el país. Las múltiples obras y los logros de su corto gobierno demuestran el gran amor y el verdadero patriotismo que el coronel Rafael Franco tenía por su querido Paraguay.
Por Brian Cáceres Verón (17 años)