No dejes que la rutina absorba tus energías; visitá algún cerro para relajarte

Salir de la cama, ir al trabajo, cumplir con las tareas, partir hacia la facultad, volver a casa y que el ciclo se repita es una constante en tu vida. Es momento de que rompas un poco con la rutina y hagas actividades que te alegren el espíritu.

/pf/resources/images/abc-placeholder.png?d=2057

Cargando...

A veces, la rutina es tan cansadora que te produce desesperación. Llegás a tu casa después de un día agotador, deseás ver esa serie que te recomendaron tus amigos, pero recordás que no podés quedarte despierto hasta altas horas de la noche o no tendrás las fuerzas necesarias para levantarte a las cinco de la mañana. Cuando pegás tu cabeza a la almohada, chequeás mentalmente todas las tareas que debés cumplir al día siguiente y, automáticamente, un afligido suspiro sale desde el fondo de tu alma.

Mirar por la ventanilla del colectivo el mismo paisaje de siempre con los arbolitos y los carteles que ya conocés de memoria hace que tu trayecto sea aburrido. Llegar a tu trabajo, preocuparte por cada mínimo detalle de la labor que realizás y sentir que necesitás más tiempo para todas tus actividades, pero a la vez desear que la hora vuele para salir de allí, son las situaciones que te tensionan constantemente.

¿Qué te parece si te relajás un poco? A veces, las cosas no son tan complicadas, pero en tu mente ya te imaginás todo el embrollo que se va a armar en caso de que nada salga como lo planeaste. No te adelantes a los hechos o vivirás con una constante nube de preocupación sobre vos.

La rutina implica las mismas actividades en los mismos lugares con la misma gente, así que tratá de romper con ese esquema a fin de que tus días no sean tan aburridos. Aprovechá tu hora de almuerzo para dar una vuelta por los alrededores de tu lugar de laburo y, cuando regreses a tu casa en bus, ponete los auriculares para que tu espíritu se alegre con tus canciones favoritas.

Otra manera de alejarte de las tensiones es aprovechando al máximo tus fines de semana; podés ir a algún cerro para ejercitar tus piernas, sentir el viento en el rostro y disfrutar de la deslumbrante naturaleza. Otra opción sería reunirte con amigos para ver alguna peli y comer pizza mientras hablan de la vida.

Cumplir con las responsabilidades es importante para llegar a ser los estudiantes y profesionales que anhelamos. Aun así, no podemos dejar que la monotonía nos borre la sonrisa del rostro, por lo que debemos intentar escapar de la rutina de vez en cuando realizando actividades divertidas y relajantes.

¡Sacate esa mochila llena de preocupaciones, agarrá la bicicleta y salí a dar un paseo para alegrar tu espíritu!

Por Viviana Cáceres (19 años)

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...