Cargando...
Un disc-jockey es la persona que se encarga de mezclar las músicas de otros cantantes para sacar una nueva composición y hacerlas sonar para que parezcan una sola. Trata de hacer que el público se anime, disfrute con la música y, en la mayor parte de los casos, que baile, todo ello sin que el ritmo decaiga.
Ser DJ no es tarea fácil porque tiene que estar actualizado en cuanto a géneros musicales, nuevos artistas, etc.; debe ser versátil y no encajonarse en una sola categoría. Armin Van Buuren, destacado DJ holandés, dice: “No seas prisionero de tu propio estilo”. Además de pasar temas de otros artistas, ellos también producen sus propias melodías, hacen remixes y editan algunas canciones.
Un DJ requiere conocimientos avanzados en cuanto al uso y manipulación de equipos, conexiones, ecualizaciones, uso de cursos y efectos, samplers (aparato que permite muestrear digitalmente secuencias sonoras), micrófonos, sintetizadores, etc.
Sobre todo, un DJ debe tener mucha creatividad y buen gusto a la hora de mezclar, cambiar e innovar estilos. También debe seleccionar temas de tal manera que la secuencia sea agradable, bailable, pegadiza y motivante para el oyente, que provoque euforia, alegría y sea capaz de divertir al público, transportándolo de un sentimiento a otro sin que éste se de cuenta de ello.
Recientemente, la revista DJ Mag ha lanzado su lista anual de los 100 mejores DJ de música electrónica. Martin Garrix se encuentra en el puesto de privilegio, seguido por Dimitri Vegas & Like Mike, Hardwell, Armin Van Buuren y Tiësto; ellos son los 5 mejores DJ. La lista continúa con otros conocidos de la industria como David Guetta, Skrillex, Afrojack y Avicii, entre otros.
La aglomeración de los DJ se puede visualizar en los grandes festivales de música electrónica que se realizan en el mundo. Uno de ellos, y tal vez el más conocido, es Tomorrowland, un evento que se desarrolla anualmente desde 2005 en Boom, Bélgica. Otro gran evento es el Ultra Music Festival, que se realiza en países como Argentina, Brasil, Sudáfrica, Japón y España.
Lo cierto es que toda la magia que rodea al arte de saber mezclar músicas no es fácil, pero cada uno de estos DJ mencionados anteriormente concuerdan en que, pese al cansancio que genera el trabajo, la pasión y la satisfacción de ver a la gente gozando con el ruido son emocionantes. Así que si tenés en mente ambientar las fiestas de tus amigos con tus mezclas, animate y sé el mejor DJ de la farra.
Por Romina Ferreira (19 años)