Cargando...
Don Pascasio Cubilla, un conocido músico no vidente de la ciudad de San Ignacio, Misiones, hacía su caminata habitual y, en el intento de cruzar la calle, fue embestido por un automovilista. La persona que manejaba el lujoso vehículo no iba a alta velocidad; sin embargo, no se molestó en detener la marcha y ni siquiera se bajó a auxiliar al anciano. Antes de este hecho, varios rodados circularon por el lugar y tampoco se detuvieron en ningún momento para dar paso al peatón.
Luego de lo ocurrido, se acercaron algunas personas para asistir a don Cubilla, quien además de ser una persona no vidente, ya es hombre mayor.
Afortunadamente, no sufrió lesiones de gravedad y prefirió no ser atendiendo en un centro asistencial. El anciano agarró nuevamente su bastón y siguió rumbo a su casa, como si nada hubiera pasado.
Los vecinos mostraron su repudio ante el hecho, ya que todos conocen a don Pascasio y le tienen gran cariño. También en las redes sociales se hicieron notar las personas que mostraban su indignación ante tal situación, pues más de uno se habrá sentido impotente al ver el video que ya circuló por varios medios. ¿Cómo es que algunas personas no tienen siquiera un poco de consideración hacia la gente discapacitada? El conductor del vehículo no solo rozó y echó al anciano, sino que tampoco se bajó a auxiliarlo.
Por otro lado, en el video se puede observar que en el lugar donde ocurrió el hecho no había franja peatonal, tampoco un semáforo y mucho menos rampas. En el caso que un inválido quiera circular por el sitio, posiblemente tendrá que hacer magia para subir y bajar las veredas. ¿Hasta cuándo vamos a seguir así? ¿Hace falta hacer campañas de concienciación para que la gente comience a recapacitar?
Es necesario que las municipalidades pongan de su parte haciendo cumplir las leyes, de tal manera que los ciudadanos circulen con seguridad en las cercanías. Todos los peatones necesitamos ser respetados y es nuestro derecho que los automovilistas nos cedan el paso. Pero, es aún mayor el cuidado que requieren las personas discapacitadas y de la tercera edad, ¿es tan difícil ser un poco más prudente?
Un Paraguay mejor se contruye de a poco, con las pequeñas acciones que todos podemos aportar día a día hasta alcanzar el país soñado.
Por Valeria Candia (19 años)