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Con tu lista de canciones podés definir cómo querés que continúe tu día, pues el estilo de música que decidas escuchar tiene un gran poder de influencia sobre tu estado de ánimo. Por ejemplo: si ponés una canción romántica, tal vez tiendas a estar reflexivo y sensible, pero si optás por otro género, ya sea, el pop, el rock o la electrónica, quizás veas las cosas con más vivacidad y alegría.
Psicólogos de la Universidad de Cambridge desarrollaron un estudio donde confirmaron que la música es un influyente directo en la personalidad. Así que, si te cargás de canciones con mensajes significativos y no de solo buenos ritmos podrás obtener resultados positivos en tu forma de ser y de actuar.
“La música da alma al universo, alas a la mente, vuelos a la imaginación, consuelo a la tristeza y vida y alegría a todas las cosas”, ya lo decía Platón. Las palabras del filósofo tienen mucha razón porque, además de que los intérpretes o compositores expresan sus sentimientos, nos dejan un mensaje que, a veces, inconscientemente, llevamos a cabo en nuestras acciones diarias.
No se puede negar que acompañar un momento feliz con temas como “Celebra la vida” de Axel Fernando; “Up town funk” de Bruno Mars; “Vivir mi vida” de Marc Anthony o “Havana” de Camila Cabello hacen que tu ánimo se eleven al 100%. Sin embargo, cuando uno se siente triste o desanimado, aunque resulta extraño, quiere escuchar temas como “Sin ti no soy nada” de Amaral, “The scientist” de Coldplay o “Alone” de Marshmello; muchas personas al escuchar estas canciones sienten nostalgia y les invade la tristeza.
Cada género tiene millones de fanáticos con infinitos gustos y diversos estilos y, en ciertos casos, se puede distinguir a las personas con determinados gustos por la forma de vestimenta o accesorios. Generalmente, se relaciona el color negro con las personas a quienes les gusta el rock o el metal; a las que visten prendas de diversos colores se las vincula con la electrónica y a las que son más conservadoras con la música clásica, jazz o baladas.
Están también los amigos a quienes les gustan todo estilo de música; con tal de divertirse y pasar bien pueden cantar a todo pulmón un rock clásico y luego bailar con ánimo una cumbia. A estas personas, por los múltiples gustos, se les consideran sociales, extrovertidas y alegres.
El poder musical es gigante, ya que puede ambientar un lugar vacío, recrear un espacio aburrido, complementar los momentos especiales y levantar a los que se sienten decaídos; solo es cuestión de descubrir su valor. Y vos, ¿qué temas preferís al estar feliz o cuando te sentís melancólico?
Por Andrea Parra (18 años)