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Hojear un libro es como adentrarse en una historia en la que tu imaginación hace el trabajo. La lectura constituye un arma importante que nos ayuda en muchos ámbitos de la vida y nos llena de conocimiento para seguir evolucionando nuestro intelecto.
Todos los días debemos comunicarnos, ya sea en la casa, el colegio, la facu y otros ambientes que acostumbramos visitar. Para poder expresarnos o escribir correctamente, debemos habituarnos a leer.
La lectura no solo es un arma que ayuda a aprender nuevas palabras, también posibilita saber en qué momentos utilizarlas correctamente. Una persona amante de los libros destaca entre las demás, tiene una manera de expresarse distinta, utilizando vocablos no muy comunes ni populares.
En un país como el nuestro, la persona que cuenta con la capacidad de comprender lo que está leyendo se ubica fácilmente un escalón por encima de la mayoría. Alguien que tiene el hábito de leer se ve culto y preparado, conocedor de distintos ámbitos de la realidad.
Es importante fomentar la lectura desde el comienzo de la etapa escolar del niño, con libros clásicos como Caperucita, Los tres cerditos, Las crónicas de Narnia, etc. Para continuar más fácilmente con ese hábito en la adolescencia, con las famosas historias de ficción como Harry Potter, Crepúsculo o El señor de los anillos. Lastimosamente, la mayoría de nuestros colegios nos entregan libros de texto con muy poca información, de los cuales resulta muy sencillo sacar las respuestas y completar los ejercicios sin mucho esfuerzo.
Cualquier libro que disfrutemos nos puede servir; no importa si es de acción, terror, fantasía o amor, todas las ramas de la lectura hacen que, a través de la imaginación, nos transportemos a distintos lugares y épocas sin salir de nuestra habitación. Por esa razón, una gran cantidad de gente prefiere los libros antes que las películas, ya que en las producciones cinematográficas ya todo está hecho, pero cuando una historia se encuentra plasmada en el papel, es tu mente la que hace el trabajo. Eso sí, si sos un niño, trata de no transportarte todavía a las escenas imaginarias que puede producir en tu mente el libro “50 sombras de Grey”.
Otra ventaja que proporciona la lectura es que alimenta nuestra curiosidad; si de repente vemos una palabra que no conocemos, resulta difícil resistirse a la tentación de buscar su significado. A la hora de estudiar, entender lo que uno lee es de muchísima ayuda para aprender más rápido y mejor.
Está en tus manos nutrirte con conocimientos día a día a través de la lectura, contás con varias vías para conseguir libros a bajo costo y así facilitar la obtención de los mismos; animate a seguir desarrollando las grandes capacidades que tiene escondido tu intelecto.
Por Diego Benítez (19 años)