Cargando...
El pasado lunes, el senador liberal Víctor Ríos anunció la presentación de un proyecto al que denomina “Equidad y eficiencia salarial”. Con esta propuesta, el parlamentario pretende disminuir el sueldo de los legisladores y el de los consejeros de instituciones binacionales, al doble de lo que percibe un docente mensualmente (5.400.000).
Más allá de los comentarios y las críticas negativas, la propuesta no viable del senador Ríos presenta una curiosa reflexión y una injusta realidad: la inequidad salarial vigente en nuestro país. En este sentido, es necesario recordar que un consejero de Itaipú percibe mensualmente G. 82.549.000, casi 40 veces el salario mínimo vigente (G. 2.112.000).
Según lo que establece el reglamento, los consejeros de Itaipú deben reunirse solamente cada dos meses y, extraordinariamente, las veces que sean necesarias. En contraste, datos de la Dirección General de Estadística, Encuestas y Censos afirman que el 50% de toda la población económicamente activa, incluidas las trabajadoras domésticas, percibe un monto inferior al salario mínimo vigente.
Por otro lado, un parlamentario gana G. 32.774.840 mensuales y tiene acceso a otros beneficios como viáticos, gastos de representación, seguro médico y la jubilación con tan solo 10 años de aporte, cobrando el 60% de su último sueldo. Sin embargo, un trabajador asegurado en IPS tiene que aportar durante 30 años y cumplir 60 de edad para jubilarse con el 100% de su sueldo; además, el IPS posee un monto máximo de jubilación que es de 10 salarios mínimos vigentes (21.125.620).
Los sueldos de nuestros servidores públicos están completamente alejados de la realidad del país. En pocas palabras, las escuelas que se derrumban, la falta de caminos en el interior y nuestro deplorable sistema de salud hacen que el salario de los parlamentarios y el de los consejeros de las binacionales representen una burla para la ciudadanía.
Casos como el de Fabiana Meza, una pequeña nativa de tres años, son reflejos de esta penosa e injusta realidad. La niña falleció a causa de una peritonitis aguda, mientras era trasladada al Centro de Salud de la localidad chaqueña Irala Fernández; este viaje duró siete horas debido al mal estado de las rutas, producto de la crecida del río Paraguay.
¡Necesitamos con urgencia cambiar este sistema! Finalmente, de las medidas de justicia y equidad que adoptemos como sociedad dependerá la transformación que todos anhelamos.
Por Rebeca Vázquez (18 años)