Hacer reír a la gente es una cosa seria y complicada

Provocar sonrisas parece tarea fácil, sin embargo, Mathías Crosa (21) dice que es complicado. “Hay humoristas que hacen reír a la gente siguiendo un guión; creo que a mí me sale de manera natural, tal vez sea un don que Dios me dio”, agrega.

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El joven cuenta que se inició en la actuación hace, aproximadamente, dos años, pero que siempre se sintió atraído por esta actividad, específicamente con todo lo que tenga que ver con el humor. “Desde pequeño me gustaba hacerle reír a la gente, era el payaso de la clase y ahora tengo la oportunidad de estar trabajando con Enrique Pavón, uno de los más capos del humor en la actualidad y, a la vez, estoy haciendo varios shows de manera individual”, añade.

Por otra parte, recuerda que su primera presentación fue hace dos años, en el Taller Integral de Actuación (TIA) de Maneglia - Schémbori, donde está estudiando actualmente. “Al principio, me sentí nervioso, incluso se me llegó a secar la boca antes de entrar al escenario y tuve que ir al camerino a tomar agua pero, al pisar la pista se me pasó, entré en el personaje y me salió todo bien”, relata Mathías.

Así también, dice que su experiencia en tevé fue hace poco tiempo, pues debutó hace tres meses en Tercer Tiempo, un programa televisivo. “Ahí estoy re cómodo porque desde que llegué, todos me recibieron súper bien, además me guían y me apoyan siempre. Me siento mejor que haciendo teatro”, expresa.

Mathías manifiesta que cuesta sacar sonrisas a la gente y que uno debe nacer con ese talento. “Hay muchos humoristas que hacen reír a las personas de una forma guionada, yo creo que a mí me sale de una manera natural, y eso es algo que yo valoro mucho, tal vez sea un don que Dios me dio”, manifiesta.

El humorista que admira a nivel nacional es Enrique Pavón, no solamente por la actuación que realiza ante cámaras, sino por el trato que tiene con el público y la humildad que posee. Así también, dice que su meta como artista es viajar al extranjero, específicamente, a los Estados Unidos o México y participar en una obra o película en esos países. “Me gustaría que conozcan la capacidad actoral que poseemos los artistas paraguayos”, añade.

Por otro lado, afirma que su familia siempre lo apoyó en todos sus emprendimientos. “Ellos son los pilares de mi vida. Mi mamá me acompaña en todos mis shows. Gracias a Dios tengo la ayuda familiar que, para mí, es fundamental cuando alguien tiene una meta”, puntualiza.

El joven comenta que su personalidad en la vida real es la misma que suele mostrar en tevé o en el teatro. “Me gusta contagiar esa buena vibra que tengo, me encanta interactuar y hacer reír a las personas, especialmente a los que están con desanimo”, expresa.

Por último, Mathías anima a los jóvenes a que persigan y luchen por sus sueños. Y que el arte en nuestro país no es algo muy apoyado, por lo que se debe hacer un doble esfuerzo. “Como dice un dicho: 'La creencia crea la realidad'. Uno puede vivir de lo que sea si hace lo que le gusta, con pasión y dedicación podés, incluso, llegar a ser millonario”, finaliza.

Por Valeria Candia (19 años)

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