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¡Oh, no! Ya se acercan los exámenes y son las instancias finales de este duro año. Por eso, tenés que dar tu máximo rendimiento y luego ver los resultados en las hojas de revisiones. Es momento de bajar un cambio con la joda, dejar el tereré bajo el arbolito, los juegos de play y el futbolacho con los perros.
Es verdad que a medida que crecemos nos gusta más la joda y tenemos la tendencia de dejar de lado o dar menos importancia al estudio, pero hay que saber separar las cosas y tener fija la meta a la cual queremos llegar todos; librarnos de los exámenes, pero con buenas calificaciones.
Comenzás a fijarte en lo apretados que están tus horarios y te desespera que todavía ni el título te pusiste a leer. Son solo dos meses de intenso trabajo y concentración en el estudio para poder sobresalir en todas las materias y no tener que rendir en febrero o, peor aun, en marzo.
¿Te imaginás tener un examen de química, física y al día siguiente matemáticas? ¡Uf!, empezá a ponerte las pilas, estudiá para entender todo lo que desarrollaron en el año; de esa manera, podés aplicarlo en el examen y cambiar el hábito del paraguayito que siempre deja todo a última hora y solo memoriza o copia para pasar.
Es cierto que aprobar las disciplinas requiere de esfuerzo y, muchas veces, las ocho horas de descanso que tenías se reducen a apenas cuatro, porque te quedaste estudiando hasta tarde y te levantaste temprano para volver a memorizar, pero el sacrificio tendrá sus frutos. Además, implica responsabilidad ya que, aparte de esto, estamos comprometidos con otras materias y no podemos descuidar ninguna de ellas.
Por todas estas razones y también si querés salvarte del jeja'o de mamá, tomá la iniciativa y leé los libros de las materias que te resultan difíciles. Asimismo, sentirás satisfacción al saber que valió la pena tantas ojeras por estudiar, las felicitaciones que recibís y el relax de unos meses de vacaciones y luego volver al colegio en un año superior con más ganas de aprender cosas nuevas. ¿Estamos de acuerdo?
Por Yanina Sosa (16 años)