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Muchas personas piensan que la juventud paraguaya se caracteriza por el kaigüetismo. “Vos, lo único que sabés hacer es dormir”, es lo que a veces tus amigos o parientes te dicen cuando tenés tiempo de sobra. La mayoría de los jóvenes se encuentran atrapados por las redes sociales a las cuales están siempre conectados; otros se pasan las horas estudiando y tratatando de encontrar algún momento para descansar.
Seguramente extrañás esa época de la niñez cuando nada te preocupaba o te impedía hacer lo que querías. Si alguna vez te quejaste de que no tenés tiempo, ¿te imaginás cómo hacen los chicos que, por necesidad, trabajan y estudian a la vez? Siempre se ve a niños y jóvenes intentando vender productos para ayudar a sus padres a cubrir los gastos de la casa y, además de eso, también se ponen las pilas para sobresalir en el ámbito educativo.
Aunque en muchas ocaciones no sabés cómo usar tus horas libres, eso no es sinónimo de quedarte en tu cama, traumado por tu cel; tenés muchas actividades que podés realizar fuera de tu casa, con tus amigos. Actualmente, algunos prefieren usar su tiempo para hacer voluntariado o practicar algún hobbie; hay muchísimas organizaciones en la que los jóvenes luchan para crear una mejor sociedad o progresar en lo que les apasiona.
Si pensás que necesitás agregarle minutos a la hora, solamente organizá tus actividades; priorizá las que son más importantes y eliminá las que no te dan beneficios. En caso de que no tengas nada que hacer y estás completamente aburrido, leé una novela que más te guste; los libros te abren puertas a la imaginación y, a la vez, entrenan tu cerebro y te hacen pasar un rato súper divertido.
Si tenés ganas de aprender algo nuevo, ¡no pierdas tu tiempo! Hay distintas maneras de pasarla bien, así que no te quejes de que no tenés tiempo o no sabés qué hacer. Todo depende de tu predisposición para que no te califiquen como un tekorei.
Por José Peralta (18 años)