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Cuando se abre el telón del escenario, una actriz o un actor debe estar preparado para todo: desde tropezones hasta el olvido del guión, pues, cuando ocurre un imprevisto, el show debe continuar. Dar vida a un personaje requiere de concentración y amor por lo que hacés, para así lograr buenos resultados en las tablas de un teatro.
Imaginate obtener una beca y viajar por 40 días a otro país, qué difícil, pero satisfactorio a la vez, pues el hecho de ganar experiencia y conocimiento son pasos fundamentales para formarse como profesional. Amambay es una de las afortunadas que irá a Broadway, Nueva York, a capacitarse en el arte con profesores de alto nivel; ella comenta que Los Ángeles y Hollywood también son lugares que, gracias a la beca, “Livin Broadway”, visitará en 2019.
La joven cuenta que la beca solo cubre ciertos gastos y, para solventar lo demás, pone en marcha actividades como hamburgueseadas; además, piensa hacer un evento artístico donde habrá números de diferentes modalidades del arte, para recaudar fondos. Amambay afirma que si uno tiene un sueño, que lo abrace y que la perseverancia siempre esté presente. "Si no hay amor en lo que se realiza, de nada sirve y no debemos esperar a que nos digan 'hacé', pues el que aguarda se atrasa", señala.
Amambay, con una sonrisa, expresa que desde pequeña siempre se destacó en lo artístico; sin embargo, al terminar la secundaria, no sabía cuál era la dirección de su futuro. "Al salir del colegio, me inscribí para formarme en diseño gráfico; después, ocurrió algo loco, gracias a una publicación que vi en Facebook, que trataba sobre un casting para estudiar teatro, me animé a hacer la audición y me seleccionaron", recuerda.
Comedia Musical Paraguay se llama la academia en donde la joven se forma como artista. “Mis profesores dicen que se nota el cambio entre la Amambay que empezó con sueños en el 2016 con la de hoy en día”, cuenta.
"Sí, hay campo y del arte se puede vivir, pero si no remás, obviamente no vas a llegar lejos" son palabras que refiere Amambay hacia los que tienen la mentalidad de que el arte da hambre. La misma señala que el teatro y el cine nacional necesitan apoyo de empresas y medios de comunicación, pues tenemos el hábito de pagar hasta un millón en conciertos de gente extranjera, pero cuando las entradas para una obra paraguaya cuestan 60.000 guaraníes, expresamos "¡qué caro!".
El objetivo de la joven artista es poder ser una de las referentes en cuanto al arte nacional que, si se hable de teatro, su nombre sea mencionado. "Si en verdad quieren sobresalir, busquen ese sueño, tengan paciencia, no se desesperen y confíen en Dios", concluye Amambay.
Por Ezequiel Alegre (17 años)