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La gimnasia rítmica, un deporte combinado con el arte de la danza y mucha belleza en los movimientos, no es tan conocida en nuestro país. Naomi Ayala es una de las jóvenes pertenecientes a la primera generación que se dedica a practicar este deporte. El mismo consta de acrobacias similares a un baile y, a la vez, viene acompañado de varios elementos: aros, pelotas y cintas. Las presentaciones pueden ser en grupos o en solitario.
“Desde que empecé con la danza a los 7 años, siempre tuve el deseo de aprender esa disciplina que es arte y deporte a la vez: la gimnasia rítmica”, relata la joven. Esta actividad, en Paraguay, solamente se puede estudiar en la Secretaría Nacional de Deportes y conlleva muchas dificultades físicas para aprenderla.
“En nuestro país es poco conocida la gimnasia rítmica, porque no hay profesores experimentados que enseñen correctamente la disciplina; actualmente solo están Irina Vikhareva y Alexandr Harelik. Ellos vinieron de Rusia para transmitir este arte y después nos tocará a nosotros compartir sus enseñanzas en el futuro”, afirma la deportista.
La joven estudió danza durante 8 años pero, a pesar de estar acostumbrada al baile, tuvo que esmerarse mucho más debido a las dificultades de la gimnasia rítmica. “Lo que un novato debe tener en cuenta en este deporte es no apresurarse en hacer algunos movimientos bruscos y, sobre todo, tomarse el tiempo para obtener una buena flexibilidad en los músculos”, comenta la artista.
Suele haber algunas opiniones negativas sobre este deporte, como la alta tasa de anorexia o el uso de drogas para bajar de peso. “En la gimnasia rítmica, como en muchas disciplinas físicas, se necesita ser delgada, pero eso se puede lograr de manera saludable con una dieta equilibrada y dedicación”, comenta Naomi.
La gente tiende a confundir la gimnasia rítmica con la artística. Sin embargo, la primera está más relacionada con el arte que con el deporte, pues viene acompañada mayormente de música orquestal y además se necesita de elasticidad y flexibilidad por parte del gimnasta. La segunda modalidad cuenta con mucha exigencia muscular y resistencia.
“La gimnasia rítmica te da la sensación de poder ser libre en el escenario, sin olvidar la alegría que te invade el cuerpo cada vez que lográs realizar las acrobacias. Habrá muchos obstáculos en el estudio de este deporte, pero al final todo el entrenamiento dará sus frutos en forma de baile”, finaliza Naomi.
Por Jorge Ferreira (16 años)